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Un arranque sin pólvora

Casi dos meses después de alzar la Copa del Mundo en Rusia, Francia, y su antecesora en el trono del fútbol mundial, Alemania, empataron en un partido que inauguró la flamante Liga de Naciones.

El entrenador alemán, Joachim Löw, ratificado pese a la debacle sufrida en Rusia, se apoyó en el eje de campeones del mundo conformado por Neuer, Kroos, Boateng, Hummels y Müller y confió la zaga a cuatro centrales. Francia, por su parte, repitió la fórmula de éxito con la que alzó su segunda Copa del Mundo, cerrando los espacios y aguardando la ocasión de una rápida transición y del contragolpe con algunas escenas en las que brilló el talento técnico del joven Mbappe.

Hasta el descanso, los tradicionales rivales y vecinos se repartieron las ocasiones en un choque parejo, apareciendo en Francia la figura de Areola y en Alemania, la de Neuer. En el segundo tiempo se encendió Griezmann y puso a prueba la destreza de Neuer. Pero conforme se acercaba el final y en medio de una lluvia pertinaz, los alemanes se abocaron al ataque y generaron más ocasiones, pero sin poder conseguir el ansiado gol. Así, el portero del PSG tuvo que esforzarse para abortar remates de Marco Reus, Hummels y Ginter (75'). Un tramo final de mucho ritmo y ocasiones, pero el cero a cero no se movió.

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