Deportes

Los blaugranas saltan la reja

  • Muchos más aficionados en el Aeropuerto Federico García Lorca que en las inmediaciones el hotel El autobús tintado impide ver a los jugadores del Barça

Llegaba el Barça a Granada con la mentalidad de mantener viva la llama de la Liga y, de paso, darse un baño de masas para, aunque sea, esbozar una sonrisa en una semana dura. El objetivo secundario lo cumplió por la mañana, con el calor, en todos los sentidos, que recibió la expedición blaugrana cuando se apeó del avión en Santa Fe. Unas once horas más tarde no cumplía la primera parte del plan, convirtiendo así su visita a la ciudad de la Alhambra en un suplicio propio de la época de los 70 cuando el Granada era el matagigantes.

La causa culé ha ganado muchos adeptos en los últimos años, sobre todo entre los que comienzan a interesarse por el deporte rey. Incluso en un ciudad mucho más partidaria del merengue que del 'pantumaca' como Granada, la diferencia ya no es tan aplastante como solía ser. Así, el Aeropuerto Federico García Lorca se tiñó ayer de azulgrana y de algunas camisetas 'senyera' para aclamar al plantel del FC Barcelona. Los hombres dirigidos por Tata Martino bajaron las escalerillas ataviados con camisas vaqueras, destacando la figura de Messi, que iba rodeado de un séquito encargado de mimar al astro argentino.

La siguiente parada en la ruta era el Hotel Abades, donde el Barça descansó hasta que salió para Los Cármenes. Hasta allí no se desplazaron tantos barcelonistas como a Santa Fe. Pocas camisetas blaugranas, curiosamente más de Neymar que de Messi y también algunas elásticas rojiblancas para poner el contrapunto y marcar el terreno.

La mayoría de las conversaciones versaron sobre la permanencia del equipo de Lucas Alcaraz, que según los cálculos de varios aficionados pasaban por sacar seis puntos entre sus duelos ante Rayo, Almería y Valladolid. Todos los que trataron el tema descartaron la posibilidad de arañar puntos en Sevilla o San Sebastián y, mucho menos, frente al Barça, ya que algunos advirtieron que "el Granada va a pagar el pato por la derrota contra el Atlético de Madrid". Se equivocaban.

Durante la espera también hubo tiempo para tratar otros asuntos de actualidad como las bajas en defensa de los azulgranas o los vómitos de Messi. Y, por supuesto, para las eternas contradicciones que se dan en el fútbol. Los mismos que esperaban ansisos con la cámara preparada para ver durante un segundo a sus ídolos, sacaron a relucir bromas sobre el sueldo de los barcelonistas o sobre el derroche que supone que el Barça se montará en el autobús para llegar a Los Cármenes, que están a unos 500 metros del Abades. Lo peor, es que solamente pudieron ver a los jugadores unos pocos afortunados dentro del hotel, ya el autobús iba tintado y tuvieron que realizar el salto de la reja. Por cierto, al final de la noche muchos cohetes por toda la ciudad que demuestran que el rojo y sobre todo el blanco siguen mandando mucho más que el azulgrana.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios