Uno de los grandes 'coñazos' de jugar en la LEB, ya sea Oro o Plata, es que algunos desplazamientos suelen ser muy farragosos. Cuando uno está en ACB se sostiene, pero categorías más abajo son desplazamientos que hay que hacer por obligación pero que exigen mucha fuerza mental y física. Sobre todo para salir victoriosos. Esta tarde, a las 18:00 horas, el Covirán Granada se medirá al Sammic ISB de Azpeitia (Guipúzcoa) en el que será el segundo encuentro en el País Vasco consecutivo. Tras este trance ya sólo quedará un desplazamiento hasta Euskadi. Algo es algo.

El partido cobra una relevancia especial después de la victoria del pasado fin de semana ante el Aceitunas Fragata Morón. Los granadinos demostraron a toda la Liga que van en serio al derrotar al que iba líder en aquel momento. Con los nazaríes de nuevo en lo más alto, seguir imponiendo su ley será el objetivo para el encuentro de esta tarde ante el Sammic, un equipo que llega al envite después de caer en el Polideportivo Pisuerga por 79-70 ante el Brico Depôt Valladolid. El mejor jugador de los guipuzcoanos fue Jordan Semple con 20 puntos y 13 rebotes en 38 minutos. A pesar de ello, Marcius Aleksandar está siendo el mejor en lo que va de temporada al promediar 15,2 puntos y 19, 2 en valoración. El director de orquesta es Rubén Gutiérrez, ex base del Clínicas Rincón en LEB Oro, que promedia un 50% en triples.

Del equipo dirigido por Iker Bueno destaca la juventud de sus jugadores, ya que ninguno supera los 25 años. De hecho, Bueno tiene 27 años. De los tres triunfos de Sammic dos han sido en casa ante CB Tarragona y Xuven Cambados (donde se encuentra imbatido) y una en la pista del Viten Getafe por 72-74. El rival del Coviran Granada lleva seis temporadas consecutivas en Plata, aunque su mejor posición fue el octavo puesto conseguido en 2013.

Una victoria del Sammic igualaría su balance con el Covirán, por lo que para los vascos es una reválida, una oportunidad para mostrar su potencial ante el líder provisional de la LEB Plata.

Los granadinos podrán contar, a diferencia de su último partido en tierras vascas, con el estadounidense Jordan Stone, por lo que el juego interior estará bien cubierto. La única baja volverá a ser la del vallisoletano Iván Martínez, que sigue convaleciente por una rotura fibrilar que le ha impedido debutar en partido oficial con los nazaríes.

Una de las claves, aparte de seguir potenciando el juego interior, será la de darle importancia en el juego a John Schoof y así descargar de más responsabilidades a Berni Castillo. Mantener el acierto desde la línea de 6,75 y equilibrarlo con la aportación desde la pintura hará al Covirán tener muchas más opciones de llevarse la victoria de Azpeitia.

El partido se jugará en el Pabellón Municipal de Azpeitia y será arbitrado por la pareja formada por Terreros San Miguel y Fernández Ortega, pertenecientes a la Federación Vasca.