Dani Benítez asumió pocos instantes después de lanzar un botellín de bebida isotónica contra Clos Gómez, que había cometido un grave error de consecuencias importantes. Su lamentable acto fue recogido por las cámaras de televisión y desde muchos sitios se ha pedido una sanción ejemplar para él. Le tocaba comparecer públicamente para pedir perdón y mostrar su arrepentimiento. Especialmente lo siente "por los niños que estaban ese día en el campo".

Pasados los días y tras haber visto lo que hizo, estima que "fue una cagada". Recuerda que lo primero que hizo tras lanzar la botella fue "irme directamente para el vestuario, porque ya sé lo que se me venía encima, estaba caliente porque acababa de terminar el partido. Íbamos ganando, no puedo ponerlo como excusa ni nada, pero teníamos la salvación y en quince minutos nos quedamos sin puntos y veía que había que jugársela ante el Rayo. Sentí mucha impotencia y actué de esa manera. Mis compañeros también lo hicieron mal. Nunca debí tirar la botella. Estaba jodido en ese momento, porque sabía que no estaría en Vallecas y me vendría una sanción grande. He perjudicado al equipo".

Una vez que ya se había cambiado y antes de irse del estadio, trató de disculparse personalmente con el árbitro aragonés, pero asegura que no le fue posible porque "había 25 policías allí y no se podía pasar, no hubo manera de hacerlo. Si tuviera su número de teléfono lo haría".

Benítez está convencido que de todo lo sucedido puede extraer al menos algún aspecto positivo. Cree que "me va a servir de experiencia tanto a mí como a todos mis compañeros, a Moisés y, sobre todo, a Siqueira, que es uno de los más afectados, le va a servir para que otra vez no le suceda esto. Lo habíamos hablado antes del partido, sabíamos que debíamos tener cuidado de no perder a ningún jugador".

No le gustó la actitud que tuvieron los asistentes de Clos Gómez. Insiste en que "uno de ellos insultó a mis compañeros, pero no voy a entrar en eso, porque ni me va a perjudicar ni beneficiar". Pese a su arrepentimiento dejó algunas dudas poco después, al comentar que en una situación similar no sabía "si haría lo mismo".

El jugador mallorquín sólo espera que se aplique el reglamento, pero sin ser más duro con él que con otros. "No tendría por qué ser más fuerte para mí que para otra gente. Deben sancionarme de la misma forma que al resto", explicó.

Por su parte, el secretario del consejo de administración de la entidad rojiblanca, Pedro González Segura, explicó que no sabe qué tipo de sanción recaerá sobre Dani Benítez, porque "en el Código Disciplinario existen muchas posibilidades. Hay varios artículos que pueden aplicar, aunque ahora estamos centrados sobre todo en el partido con el Rayo Valecano".

Como no se sabe la sanción que va a recibir, algo que se conocerá durante la jornada de hoy, González Segura está a la espera de que "dictamine el Comité de Competición, que debe aplicar la sanción que se ajuste a derecho respecto a lo que hizo Dani Benítez".

No se van a recurrir las sanciones por las tarjetas rojas que recibieron tanto Siqueira como Moisés Hurtado, ya fue fueron insultos que "están consignados en el acta y sólo cabe esperar la resolución. Ahora es mejor pasar página y ya la semana que viene entraremos en la casuística y los detalles de todo".