El Covirán Granada jugó este viernes, aprovechando el parón de la LEB Oro por los partidos de las Ventanas FIBA, un duelo de entrenamiento con el Unicaja Málaga de la ACB en el Pabellón Martín Carpena. La principal novedad del duelo para los de Pablo Pin fue el estreno de Ramón Vilà, reciente fichaje que disputó así sus primeros minutos como rojinegros. El duelo, que fue igualado aunque no se quiso hacer público el resultado por ambos bandos, tuvo las bajas en el cuadro malagueño de los internacionales Alberto Díaz, Francis Alonso, Barreiro y Guerrero.

Para el técnico del cuadro granadino el choque “nos ha venido muy bien sobre todo porque a nivel físico hemos tenido que ofrecer el 200% para poder competir a pesar de que ellos tenían muchas bajas y las han suplido con jugadores de su equipo de Liga EBA que cuentan con un buen nivel físico”.

Pablo Pin manifestó que “hemos hecho un partido muy serio, con un nivel alto de dureza y con bastante buen ritmo”. El máximo responsable de la entidad rojinegra pudo contar con Vilà, del que dijo que “ha jugado de cuatro y de cinco”, pero además la cita sirvió para “probar situaciones diferentes como que Jacobo Díaz jugase de tres”. En definitiva, “el objetivo lo hemos cumplido”.

El Covirán Granada descansará este fin de semana y desde el lunes comenzará a preparar el duelo ante el Huesca en una competición que el técnico considera que “en la segunda vuelta será más complicada porque todos los equipos se están reforzando pero nosotros tenemos que seguir nuestro camino”.