El Recreativo Granada se llevó un punto en su visita al Álvarez Claro de Melilla en un partido poco vistoso y sin apenas ocasiones que tuvo dos partes bien diferenciadas. En la primera el filial pudo haber conseguido una ventaja superior a la obtenida finalmente antes de la llegada del tiempo de descanso, pero en la segunda los norteafricanos dominaron más generando acercamientos suficientes como para conseguir empatar el marcador y repartir los puntos. Con todo, la parte final del encuentro fue sorprendentemente plácida, sin agobios, dejando la sensación de que no era por falta de ganas de ambos equipos, sino más porque ninguno fue capaz de conseguirlo.

El resultado dejó a los de Pedro Morilla con una sensación de victoria, al hacerlo en el campo de uno de los equipos claramente favoritos a luchar por el ascenso a Liga 1|2|3 el próximo mes de junio. Además, el tanto logrado por Ontiveros logró romper una racha de casi dos meses sin ver portería contraria, ya que el último tanto lo lograron el pasado 22 de diciembre en el Nuevo Colombino de Huelva.

El duelo comenzó con dos equipos que tardaron varios minutos en adaptarse a las condiciones del terreno de juego, en muy mal estado y con demasiados desniveles, que impedía que la pelota rodara recta sin botar. En el minuto siete se vio la primera ocasión local, con un tiro lejano de Brian Martín que se marchó fuera por poco. El choque no avanzó y se diluyó en el centro del campo sin que ninguno de los dos equipos controlara por mucho tiempo la pelota ni por supuesto generara peligro real en las áreas. Los locales tuvieron la segunda ocasión superado el primer cuarto de hora y su protagonista fue el mismo, un incisivo Brian Martín que recibió un balón dentro del área escorado en el costado izquierdo y su disparo flojo lo atrapó Esteve sin problemas.

La respuesta del ‘Recre’ llegó directamente con el 0-1. Una jugada bien hilvanada por la banda derecha, con llegada hasta línea de fondo de Jean Carlos, acabó con un remate de cabeza de Ontiveros en el punto de penalti. El gol provocó que los de Luis Carrión tuvieran mayor tranquilidad y criterio a la hora de manejar el cuero. Sin embargo, los continuos fallos en la salida de balón e imprecisiones de pase ya en campo rival provocó que el filial lanzara rápidos contragolpes sobre la meta de Barrio. Así, sin demasiado buen fútbol, pero con ventaja para el Recreativo Granada, se alcanzó el final de la primera parte.

Tras el descanso, el Melilla entró renovado al choque con cara bien distinta a la de la primera mitad y con un importante recambio ofensivo que en segundo se dejó notar. Óscar García entró al terreno de juego y al poco recibió un buen pase de Traoré que, tras controlar, soltó un disparo Esteve atajó. Fue el preludio del empate que llegó antes de cumplirse el minuto cinco de la segunda parte. Traoré, por el costado derecho y tras apurar todo lo posible, puso una pelota al punto de penalti para que Heber Pena pusiera un duro disparo ante el que nada pudo hacer el meta rojiblanco.

La igualada dio ánimo a los locales que tan sólo dos minutos más tarde provocaron de nuevo el desasosiego entre los de Morilla. Pena fue derribado en un balón largo al área y el colegiado manchego Cambronero González señaló en un primer momento penalti, aunque, tras consultarlo con el asistente cambió de parecer y otorgó fuera de juego del delantero melillense. La acción cabreó a la grada local que en buen número asistió al Álvarez Claro.

Tras la polémica acción el conjunto rojiblanco tan sólo consiguió quitarse la presión de los locales. El partido entró en una fase de mayor igualdad y pelea, pero costó verse alguna ocasión sobre las áreas. El capitán Andrés García buscó un lanzamiento lejano que se fue fuera rozando el palo derecho de la meta local.

Ambos técnicos decidieron sacar la pizarra para tratar de preocuparse más de sus defensas que de ir con decisión a por los tres puntos. El ‘Recre’ disfrutó de la última ocasión de peligro con un lanzamiento de Juancho que atajó Barrio con una buena estirada, acción que se desarrolló cuando el reloj apenas pasaba el minuto 80.

El empate supone el tercero consecutivo de un filial que suma nueve jornadas sin conocer la victoria. El gol de Ontiveros corta la mala racha de cara a portería, pero no acaba con la preocupación de ver cada vez más cerca los puestos de peligro, que quedan sólo a un punto.