Un fatídico minuto mediado el primer tiempo empezó a desnivelar el choque entre el San Fernando y el Loja disputado en el estadio Iberoamericano, que finalizó con el resultado de 2-1 a favor de los gaditanos. En ese intervalo de tiempo los lojeños perdieron primero a Benji por lesión y, acto seguido, su sustituto, Sillero, fue expulsado con roja directa por cometer penalti. El central lojeño apenas estuvo un minuto sobre el campo. Los de Estévez se quedaban con un jugador menos y por detrás en el marcador. Por ahí empezó a complicarse un partido que a punto estuvieron de levantar los visitante en la segunda parte en una heroica reacción que no llegó a concretarse.

Cierto es que los locales desaprovecharon también ocasiones para haber hecho más goles, destacando la figura del portero lojeño Tejera. También es de resaltar la pelea de los jugadores del Loja, con un jugador menos durante 70 minutos en un campo muy pesado por la abundante lluvia.

No menos cierto es que la salida del San Fernando fue mejor y que el Loja no reaccionó hasta que se vio por detrás en el marcador. Los de Bahía Sur buscaban la primera victoria de la temporada en casa, donde no habían podido dedicar un solo triunfo a su afición. Dos acciones de peligro en los primeros minutos, solventadas en defensa, dieron paso al primer acercamiento lojeño (9') en una jugada de Gato, que robó un balón en el centro del campo pero no aprovechó.

El mayor peligro lo llevaban los locales. En el 20', Adri Cuevas obliga a Tejera a tener que intervenir por primera vez. El Loja ya había perdido a Benji por lesión en una acción fortuita en un despeje del propio defensor. Su sustituto fue Sillero, que se colocó en el centro de la defensa, lo que llevó a Oli al lateral izquierdo. Sin embargo, al central lojeño no le dio tiempo apenas de participar pues, en su primera acción, cometió penalti ante Pallarés, que le ganó la posición en el área. Roja directa y Pedro Carrión que transformaba el máximo castigo (1-0).

La expulsión obliga a una reestructuración del equipo, pasando Nino al centro de la defensa y retrasando a Ramiro al centro del campo. Peor no se podía poner la cosa.

Fue entonces cuando llegó la reacción de los lojeños. Una buena jugada de Ramiro (28') con pase a Gato acabó con un disparo flojo a las manos del portero.

El San Fernando, cuya principal virtud es el contragolpe se encomendó a esta suerte, seguro de que le iban a llegar oportunidades con un Loja que iba a dejar espacios. En una de ellas (31'), un centro pasado no lo aprovecha Lolo. Cuatro minutos después Tejera interviene a disparo de Pallarés.

Los lojeños rozaron el empate antes del descanso (42'), en una jugada de David Gámiz con envío a Ramiro cuyo disparo roza en un defensa y se va a a córner. En la siguiente acción, Darío Ruiz ni Pedro Corral ni Ramiro llegaron para marcar. Fueron los mejores minutos del Loja, que dieron paso al descanso bajo una fuerte lluvia.

La segunda parte arranca con varias ocasiones locales en los primeros minutos fruto del espacio que dejaba el Loja en defensa. A pesar del riesgo que corría en defensa, el Loja no renunciaba a seguir intentándolo en un terreno de juego pesado y resbaladizo. En el minuto 59', Pedro Corral está a punto de quedarse solo ante Valle en un envío de Ramiro que salva in extremis la defensa.

Los minutos pasaban y eran los de Estévez los que dominaban y hacían todo el gasto. El San Fernando se sentía cómodo y seguía poniendo sus opciones en el contragolpe. Ñoño (63') está a punto de marcar tras robar a Gabi Ramos, pero su disparo se marcha alto. No le dio tiempo ni para lamentarse, pues a continuación sí acertaba para batir a Tejera con una vaselina que parecía sentenciar el choque (2-0). Más de uno en Bahía Sur pensaba ya en la goleada. De hecho, Carlitos, Carrión y Antoñito disponen de nuevas ocasiones. Es entonces cuando David Gámiz recorta junto a la frontal del área a Eder, quien comete penalti. Quedaban diez minutos y Dani González acortaba distancias (2-1).

Al San Fernando le entra el susto en el cuerpo y el Loja vuelve a creer en la posibilidad de una nueva remontada, como hiciera hace dos semanas en Jaén, y vuelve a lanzarse arriba ante un rival temeroso y tratando de perder todo el tiempo posible. Ya habían desparecido los recogepelotas en el descanso y, por supuesto, no volverían a aparecer. Es entonces cuando Darío Ruiz tiene la gran ocasión de dar el empate a su equipo, pero su disparo roza en un defensor y se marcha por poco.

El 2-1 ya no se movería a pesar de los intentos postreros de los lojeños. Esta vez la reacción llegó un poco tarde y no se terminó de producir. Un mal comienzo de partido y un fatídico minuto ya habían puesto el choque cuesta arriba. Lo peor, la nueva lesión, otra más en la línea defensiva, la más castigada esta temporada. Una semana más habrá que recomponer el equipo para el siguiente partido.