Rafael Nadal igualó el récord de seis títulos sobre la arcilla parisinas del sueco Bjorn Borg, "un honor, pero lo más importante es ganar otro Roland Garros, enfatizó el español antes de anticipar que buscará conquistar su séptimo triunfo en 2012: "Voy a seguir trabajando para volver el año próximo aquí y vencer una vez más, aunque ya que comparen con Borg es un verdadero honor ".

Ahora, el mallorquín jugará "con menos presión" en Wimbledon, pero no por eso con menos ilusión y motivación". Sin embargo, Nadal admitió que su momento de mayores esperanzas en cada temporada es cuando a finales de mayo llega la cita de París. "Éste es el torneo en el que siento que tengo las máximas posibilidades de ganar dentro de los de Grand Slam. Si gano aquí, entonces mi temporada es fantástica".

Y es que después de las cuatro derrotas ante el serbio Novak Djokovic, en igual cantidad de finales consecutivas, que fueron un factor importante para el mal juego que mostró en la primera semana del torneo, todo acabó enderezándose: "Llegué aquí probablemente con menos confianza que otras veces por esa razón, porque lo vi jugando fantástico. Perder cuatro finales no es fácil. Mi sensación era que estaba teniendo una campaña buena, con seis finales consecutivas, y no gané dos en las que tuve muchas ocasiones de conquistar, como las de Indian Wells y Miami".

Esta vez no fue el balcánico su rival, sino un Federer al que Nadal elogió por su juego. "Roger jugó un torneo fantástico en mi opinión. Su nivel en semifinales fue muy, muy alto. Creo que conmigo tuvo un poco de mala suerte en el primer set. En el tercero, con un 4-2 en contra, sacó su mejor tenis con un revés espectacular, que da más valor a mi victoria".

Emocionado y feliz, el balear dio "gracias a la vida" antes de recibir la Copa de los Mosqueteros de manos del estadounidense Jim Courier, ganador de cuatro títulos del Grand Slam, dos de ellos en la tierra parisina, en 1991 y 1992. Ya con el trofeo en su poder, Nadal mezcló español, inglés y francés para felicitar a su rival "por este torneo magnífico y por este partido", a su familia, a su equipo, al público y "a todos los que hacen que este sea el mejor torneo del mundo".

Mientras, Federer fue muy explícito: "Rafa es impresionante". "Yo estaba realmente cansado, no fingía, pero es que Nadal juega mejor contra los mejores y es justo vencedor", afirmó el suizo.