fútbol copa del Rey

El premio de una semifinal

  • El Sevilla quiere hacer buena su ventaja frente a un Atlético que confía en poder darle la vuelta al 1-2 de la ida

  • Simeone medita un once ofensivo

Montella observa a sus jugadores durante uno de los ejercicios del entrenamiento vespertino de ayer.

Montella observa a sus jugadores durante uno de los ejercicios del entrenamiento vespertino de ayer. / juan carlos muñoz

El Atlético de Madrid se mide hoy al Sevilla con la obligación de remontar el 1-2 adverso de la ida si quiere estar en las semifinales de la Copa del Rey y evitar otro golpe prematuro tras quedar fuera de la Liga de Campeones.

El encuentro es cuestión de supervivencia. Para los dos equipos, pues el Sevilla encontró en la Copa un torneo al que agarrarse después de su decepcionante trayectoria en la Liga. El resultado del primer partido le alienta en ese objetivo. Poco tiempo tuvo Simeone para recuperar a los suyos del gran daño moral sufrido en la ida en su estadio. Tenía todo a favor, incluido un valioso gol, y lo dejó escapar con un final de encuentro desafortunado. "La Copa es ilusionante, seguimos con el mismo pensamiento, será un partido difícil. La eliminatoria ahora está mejor presentada para el Sevilla, pero hay partido, hay que jugar e intentar darle la vuelta", dijo ayer el técnico de los rojiblancos.

Pero, para acrecentar los males, el Atlético se quedó sin el lesionado Diego Costa para el intento de remontada. Así, Simeone deberá improvisar una línea atacante en la que Griezmann tiene plaza asegurada y la incógnita será saber el nombre de su acompañante. En principio, Gameiro tiene las mejores opciones, aunque tampoco es descartable que Simeone acuda a un símbolo como es Fernando Torres. Otro de los focos del encuentro quedará para Vitolo, quien visita su antiguo estadio esta vez con la camiseta rojiblanca. Se espera un recibimiento tremendamente hostil, pues la hinchada del Sevilla no olvida cómo se marchó de allí. Simeone cree en la remontada. "Siempre soy optimista de cara a lo que tenemos y lo que veo. Y sobre todo conociendo el plantel que tenemos, el equipo está bien, la segunda parte ante el Sevilla y el partido ante el Girona fue bueno mas allá de los detalles a mejorar que te hacen ganar o perder", añadió.

Para el Sevilla, el encuentro es doblemente valioso: tiene a mano las semifinales de la Copa y el choque medirá si todavía hay motivos para confiar en el equipo de Vincenzo Montella. En las últimas semanas acumuló dos triunfos seguidos en la Liga y la victoria de la Copa para alimentar la ilusión en un futuro mejor. Así lo cree su hinchada, que llenará al completo el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán. "Será muy bello ver cómo nos unimos más que nunca. Vamos a estar más unidos que nunca porque los chicos necesitan el apoyo de la afición", manifestó ayer el entrenador italiano del conjunto de Nervión.

El centrocampista argentino Banega volverá a ser el eje del conjunto sevillista y la cuestión es ver a quién sitúa Montella como delantero, con opciones para Ben Yedder y Luis Muriel.

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