No paran los problemas para Urbano en cuanto a las bajas para confeccionar la convocatoria de jugadores que se desplacen hoy rumbo a la capital de Extremadura. Y es que tampoco pudo acabar ayer el entrenamiento Jonathan Rey, con fiebre y aquejado de un enfriamiento, que le impidió realizar el trabajo junto a sus compañeros. Habrá que esperar al último entrenamiento de esta mañana para observar si cesa la fiebre y va recuperándose, de lo contrario tendrá que quedarse en casa y perderse el partido frente al que fue su equipo, el Mérida, donde sin duda tiene muchas ganas de volver y colaborar en una victoria bastetana.

En cuanto al trabajo realizado durante la semana el cuerpo técnico ha incidido en buscar motivar a los jugadores de manera especial de cara a afrontar el partido de mañana. Frases como "acabaron las fiestas, estamos dormidos, más intensidad y en el fútbol no hay excusas", se han escuchado varias veces de boca de Urbano y sus colaboradores durante las sesiones de trabajo semanales. Y es que es muy importante puntuar en Mérida y una semana después en el Puerto de Santa María. Y dentro de esta motivación se ha intensificado el trabajo en buscar de perforar la portería contraria. El entrenador paró un entrenamiento junto a sus jugadores en el centro del campo y les preguntó: "¿Queréis ganar partidos?, pues para ello hay que meterla allí -señalando la portería donde acababan los ejercicios- y no pensar que es fácil lograrlo, pero sí hay que estar convencidos de que podemos hacerlo cuando estemos cerca de la portería contraria".

Del Mérida, que como en años anteriores están pasando serios apuros económicos, la noticia es que no hay novedades en el equipo. Salvo el jugador sancionado, están todos disponibles, y aunque esperanzados en conseguir una victoria frente al Baza, no dejan de reconocer que cuando actúan de visitantes, los de Urbano, son uno de los equipos más peligrosos. También destacar que el equipo romano pidió a principio de semana que el partido se aplazara al lunes, sin duda para ganar un día más de preparación, habida cuenta que ellos se incorporaron a los entrenamientos el pasado miércoles, pero el Baza ya tenía programado tanto el trabajo semanal como el desplazamiento y no pudo acceder a complacer la petición emeritense.