La asamblea extraordinaria del Granada CF decidió al filo de las 21:30 horas aprobar por mayoría que Ignacio Cuerva sea el presidente de una junta gestora. En ese momento recibió la felicitación de los directivos salientes. Esa decisión final llegó a esa hora de la noche, pero durante el resto de la jornada estuvo muy en el aire que el empresario diera ese paso. Por la mañana estuvo a punto de arrojar la toalla, al considerar que no disponía de los apoyos suficientes para embarcarse en esta aventura y ya por la tarde decidió ir hacia adelante después de mantener una reunión con su hermano Gerardo, presidente de la Confederación Granadina de Empresarios, y Javier Jiménez, presidente de la Cámara de Comercio.

Los empresarios no lo tuvieron claro hasta última hora de la tarde. Al final y tras deliberar los pros y los contras y mantener algunas llamadas telefónicas, decidieron ir hacia adelante y se trasladaron hasta la asamblea para comunicarlo a los socios. El cónclave se extendió por espacio de hora y media y se abarrotó el Centro Cívico del Zaidín.

El ciclo de Paco Sanz tocó a su fin. El hasta ayer presidente en funciones intervino y le pidió a Cuerva que tomara la palabra, pero éste prefirió no hacerlo en un principio hasta que se sometiera a votación el primer punto del orden del día. Los socios rechazaron por mayoría la convocatoria de elecciones y se pasó a la de plantear otras alternativas. Antes de que se hiciera, el presidente de la Federación de Peñas, César Guisado, leyó un comunicado en el que criticó la gestión de la directiva saliente y lamentó entre otros aspectos que no se hubieran dado las cuentas o no haber cumplido con los pagos a Hacienda.

Tras esa intervención, Ignacio Cuerva tomó la palabra desde la primera fila en la que se encontraba y dijo que si no había otra alternativa como gestora, él estaba dispuesto a encabezar una. Argumentó que había dado ese paso porque el club se encuentra "en una situación límite y compleja". Estima que a través de una gestora hay más posibilidades para reconducir el club y sacar esta temporada adelante. Recordó que el movimiento de la Federación de Peñas y las protestas de los jugadores llevó a la Cámara de Comercio y la Confederación Granadina de Empresarios "a tomar la iniciativa ante una situación extrema".

Dejó claro que "no soy una alternativa a Paco Sanz, ni de nadie, y este paso lo voy a dar con todos vosotros. Soy la representación espontánea para poner todo el esfuerzo para recabar apoyos". Recalcó que la situación es límite y que había riesgo de desaparición. Dijo que no estaba dispuesto a asumir el reto si algunos tenían dudas. En su intervención hizo referencia a la campaña extraordinaria que se va a lanzar con el carné-ayuda y pidió el apoyo de los socios, ya que entre el dinero de las instituciones y de los empresarios se alcanza el 50 por ciento de lo que se necesita para cubrir esta temporada. Señaló que sí hay una respuesta masiva de los socios "será el mejor aval y el mayor patrimonio que podremos presentar para los que están fuera y tienen dudas". Indicó que él no tenía patrimonio para responder en caso de que los socios no ayudaran a sacar adelante el club.

Algunos socios intervinieron para pedirle que aclarara algunas cuestiones. Ignacio Cuerva insistió en que "el enfermo lo tenemos en la mesa y no le debemos de dar vueltas siempre a lo mismo. Si hay dudas, me voy a mi casa".