El consejo de administración de Iberia aceptó ayer la renuncia voluntaria de su presidente, Fernando Conte, y acordó por unanimidad nombrar como primer ejecutivo de la compañía a Antonio Vázquez, ex presidente de Altadis y que ya fue consejero de Iberia entre los años 2005 y 2007. El consejo también designó como consejero delegado a Rafael Sánchez-Lozano. Conte abandona la presidencia de Iberia "por razones personales". "Ha sido una decisión profundamente meditada que trasladé hace meses al presidente de la Comisión de Nombramientos y Retribuciones y que no he querido tomar hasta que mi sustituto estuviese decidido", señaló Conte.

Su renuncia, que fue saludada en Bolsa con una subida del 1,7% de los títulos de Iberia, coincide con el acuerdo laboral con los pilotos y con el lanzamiento de la nueva Vueling, fruto de la fusión entre Clickair y Vueling. Conte deja el cargo en la peor crisis del sector del transporte aéreo y sin haber concretado la integración con British Airways, después de que ambas compañías anunciaran hace un año su intención de fusionarse. Esta unión pretende crear la tercera aerolínea del mundo y debería estar culminada antes de agosto. Sin embargo, en las últimas semanas las relaciones se han enfriado y no se perciben avances en el proceso, circunstancia que podría haber precipitado la salida de Conte. La lentitud en la negociación habría provocado cierto malestar en Caja Madrid, máximo accionista de la aerolínea, que podría estar detrás de la renuncia del que ha sido presidente de la compañía desde 2003. La fusión será ahora el principal reto del nuevo directivo de Iberia. Antonio Vázquez, nacido en Córdoba hace 57 años, ingresó en Tabacalera en 1993, tras haber adquirido una amplia experiencia en comercio exterior durante 15 años en las multinacionales andaluzas Osborne y Domecq.

Tanto British Airways como Caja Madrid dieron la bienvenida al nuevo directivo, e insistieron en que la fusión "sigue su curso". Vázquez se estrena hoy en el cargo con una reunión con los sindicatos de la empresa. CCOO expresó su "sorpresa" por el relevo, aunque los pilotos le mostraron su apoyo. "Tiene nuestra plena colaboración para superar estos difíciles retos", aseguró el jefe de la sección del Sepla en Iberia, Justo Peral.