Economía

Cajamar se adelanta a la reforma de las cajas rurales que reclama De Guindos

  • La entidad aprueba sus cuentas de 2016, con 76 millones de beneficio, un 8,4% más que en 2015

Cajamar celebró ayer su Asamblea General, con más de 250 delegados que representan a sus 1,4 millones de socios.

Cajamar celebró ayer su Asamblea General, con más de 250 delegados que representan a sus 1,4 millones de socios. / rAFAEL gONZÁLEZ

"Se trata de crecer, sí... Pero crecer juntos". Este es el lema que exhibió ayer Cajamar en el vídeo que mostró minutos antes de la celebración de su Asamblea General Ordinaria, a la que asistieron lo más de 250 delegados de sus más de 1,4 millones de socios. La cooperativa de crédito almeriense lo tiene claro y lanza un mensaje a sus clientes, a los que convida para que la acompañen en el viaje; también es un guiño hacia otras cajas rurales, avisando de que sólo emprenderá proyectos de fusión o integraciones cuando se coincida en los mismos objetivos. Bajo esa filosofía, Cajamar exhibió ayer buena salud financiera ante sus socios, además de mostrar que ha sabido hacer los deberes, incluso, mucho antes de que el profesor los pusiera en la pizarra.

Para el presidente de Cajamar, Eduardo Baamonde, era la primera asamblea al frente de la entidad, pues fue elegido en el cargo en la anterior, celebrada el 27 de abril de 2016. Baamonde hizo hincapié en la reforma de la Ley de Cooperativas de Crédito, unos deberes que el Gobierno central había pospuesto y que el ministro de Economía, Luis de Guindos, ha reactivado a finales del pasado año. Según el presidente de Cajamar, "todo indica" que esta reforma va a incentivar la constitución de sistemas institucionales de protección (SIP) con el fin de dar respuesta a eventuales problemas de gobernanza y solvencia que puedan presentarse en un futuro. Una cuestión que Cajamar tiene resuelta, ya que en 2009 se anticipó con la constitución del primer SIP del sistema financiero español, actualmente integrado por 20 entidades, y que lleva funcionando desde 2014 bajo la supervisión del Banco Central Europeo, tras superar con nota la entidad almeriense los famosos 'test de estrés'.

En ese sentido, Baamonde recalcó que "esa iniciativa sea también para otras entidades un nuevo y verdadero paso adelante encaminado a una mejora de la gobernanza, y a garantizar la capitalización y la solvencia de todas las entidades".

Ese instrumento pionero de Cajamar le supone ahora navegar en aguas tranquilas, por lo que el futuro se mira con expectativas de crecimiento muy positivas. El ejercicio 2016 lo ha cerrado con un beneficio de 76,1 millones de euros, un 8,4% más que el año anterior, cuentas que aprobó ayer la asamblea. Todo ello, a pesar del contexto "convulso" que ha supuesto 2016, "con importantes cambios de alcance geopolítico, que han aumentado la incertidumbre y suscitado nuevos riesgos económicos, financieros, políticos y sociales", apuntó el presidente de la entidad almeriense.

Pese a que la economía española creció un 3,2% en 2016, la inversión crediticia, recordó, "se contrajo por sexto año consecutivo, con un recorte del 3,8%, en nuestro caso hemos conseguido incrementar nuestra cuota de mercado nacional que alcanza ya el 2,6%".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios