La reordenación energética Los grandes grupos dirigen la vista a las renovables

March y Endesa encienden Isofotón para que brille en Bolsa

  • El grupo bancario aporta músculo financiero y refuerza la gestión del pionero de la fotovoltaica en España · La eléctrica impulsa su desarrollo industrial y comercial

Isofotón es una pera en dulce que ha despertado el apetito de lo más granado de la industria y las finanzas españolas -Endesa y Grupo March-, en la coyuntura de mayor auge de las energías renovables a escala mundial. La firma fotovoltaica nacida de una idea en la Universidad Politécnica de Madrid, que se materializó en Málaga en 1981 y hoy vende placas solares en 60 países, atraviesa el mayor proceso de cambios en su estructura interna y desarrollo industrial en sus casi tres décadas de historia. Todo ello en medio de la reordenación del mapa energético español, al que la propia March no es ajena, sino todo lo contrario, merced a su presencia en ACS (tiene el 20%), que posee a su vez el 12% de Iberdrola y controla Fenosa.

Nadie, ni siquiera el nuevo presidente Carlos Torres -procedente de Endesa y que aterrizó en la firma en febrero-, niega que el objetivo último de estos cambios sea la salida a Bolsa a medio plazo. Precisamente su llegada a lo más alto de uno de los pioneros del sector solar español ha dado alas a esta posibilidad. Con todo, la mejor pista sobre esa posible trayectoria la ofreció en julio del pasado año el grupo financiero March, que adquirió el 26% por 150 millones y dejó el resto del capital en manos del grupo Bergé, propietario desde 1997. March respalda así los planes de inversión de 182 millones para duplicar su capacidad de producción en 2011 y, desde dentro, promueve el reforzamiento del equipo directivo.

Expertos con amplia trayectoria en el sector fotovoltaico andaluz destacan la experiencia de Carlos Torres en el sector energético, primero en la consultora McKinsey y, después, como director corporativo financiero de control y director de Estrategia de Endesa durante cinco años. Todo ello para argumentar que el directivo de 41 años es el hombre adecuado para guiar a la firma hacia el parqué.

"Tiene un Master of Business Administration (MBA) en el prestigioso MIT de Boston y es una persona muy resolutiva y muy ambiciosa", subraya un directivo de otra empresa energética que conoce bien la compañía malagueña. "Además, normalmente en Isofotón los presidentes han sido representantes de Bergé sin atribuciones ejecutivas, y él sí las tiene".

Ambas fuentes coinciden en que "al ganar tamaño, el modelo de gestión tiene que cambiar". El propio Torres se ha fijado como meta más que cuadruplicar la facturación para alcanzar los 1.300 millones en 2011, desde los casi 300 con los que cerró 2007.

"El crecimiento de Isofotón exige una capacidad industrial, de ventas y un músculo financiero que impedía a Bergé seguir gestionando sola la empresa. Y si el objetivo es sacarla a Bolsa, desde luego esta compañía en solitario no tenía los padrinos adecuados para hacerlo, algo que ha cambiado con March y Endesa", explican medios consultados en el sector energético.

El papel de la segunda eléctrica española respecto a Isofotón está, en buena medida, sin escribirse y no pasa sólo por que sea un ex directivo de Endesa quien presida ahora la firma. De momento, ambas compañías, con una vinculación histórica con Andalucía, lideran la sociedad que está construyendo una fábrica de polisilicio en Los Barrios (Cádiz) en la que se invierten 250 millones. Será la primera de España, séptima del mundo y en ella participan también Grupo Gea 21, Unicaja, Cajasol, Caja Granada y el BEF (banco de cajas andaluz). Además, Isofotón surtirá a Endesa de 100 Mw en paneles solares que la eléctrica instalará en sus centrales en España.

Ante todo ello, ¿qué papel jugará José Luis Manzano, que llegó a Isofotón en 1987 y es consejero delegado desde 2005? De momento, su cargo ha cambiado al de vicepresidente ejecutivo, pero por encima tendrá a un presidente con las mismas atribuciones que ha aterrizado "en una pyme venida a grande". Esa fuente del sector energético coincide con la mayoría de los analistas del sector cuando asegura que Manzano "tendrá un papel destacado en el futuro porque representa la voluntad y el espíritu original de la compañía, pese a que su mentalidad, en cierta manera romántica, quizá no casa bien con la del mercado bursátil".

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