Red Eléctrica ha manifestado a Abertis su interés por tomar una eventual participación en el capital social de Hispasat, operador de satélites controlado al 90,8% por parte del grupo de concesiones de infraestructuras, después de que el pasado mes de mayo se viera obligado a comprar la participación del 33,6% que Eutelsat poseía al ejercer la francesa un derecho de venta al resto de socios.

El interés del operador del sistema eléctrico por la firma que preside Elena Pisonero transciende en medio de la opa que Atlantia ha lanzado sobre Abertis.

Asimismo, se conoce en tanto el grupo italiano y el Gobierno español discrepan sobre la necesidad de que el Ejecutivo autorice o no el traspaso de los satélites y las autopistas que explota Abertis.

Red Eléctrica enmarca su interés en Hispasat en su estrategia de crecimiento, con la que mantiene una "búsqueda activa de oportunidades de inversión en transporte de electricidad y telecomunicaciones". La compañía está ya presente en este negocio mediante la gestión de redes de fibra óptica, entre ellas la de la red ferroviaria.

La corporación que dirige José Folgado está controlada por el Estado a través de SEPI, que ostenta el 20% de su capital. Asimismo, el 9,2% de Hispasat que no está en manos de Abertis es también estatal, a través del CDTI (1,8%) y de SEPI (7,41%). No obstante, Red Eléctrica tan sólo ha mantenido "conversaciones" con Abertis y no ha adoptado aún decisión alguna ni ha tratado en su consejo de administración sobre una potencial inversión en Hispasat.

Abestis, a través de una comunicación a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), confirmó haber recibido una "manifestación de interés" por parte de Red Eléctrica, si bien "hasta la fecha no ha recibido ninguna propuesta vinculante y, por lo tanto, no se ha analizado en su consejo de administración".

La eventual venta de Hispasat por parte de Abertis no supondría obstáculo a la opa que Atlantia ha lanzado a este grupo de concesiones. En el folleto de la operación, la compañía italiana muestra su disposición a vender el gestor de satélites si lo pide el Gobierno. Esta eventual venta abarataría además el importe de la transacción, de unos 16.341 millones al precio propuesto por la italiana.