La firma automovilística española Seat, propiedad del grupo Volkswagen, registró un beneficio operativo de 54 millones de euros en el primer trimestre, lo que supone un alza del 63,6% en comparación con el mismo periodo de 2015.

La compañía con sede en Martorell (Barcelona) superó significativamente el resultado operativo de 33 millones del primer trimestre de 2015 y logró su mejor resultado en los tres primeros meses del año desde 2001.

Esta mejoría se explica por la elevada demanda que han experimentado los vehículos de su gama de producto, especialmente sus dos principales pilares, el Ibiza y el León. A este aumento del beneficio también contribuyó, a su vez, la reducción de costes que está llevando a cabo la compañía.

La facturación de Seat se situó en 2.070 millones entre enero y marzo, lo que representa una disminución del 5,1%. Las ventas de vehículos, que incluyen el Audi Q3 fabricado en Martorell, fueron de 127.000 unidades, un 7,8% menos.

Por su parte, los beneficios de la matriz Volkswagen se hundieron más de lo esperado en el primer trimestre debido a los efectos del escándalo por la manipulación de emisiones en sus coches diésel. El grupo alemán registró un beneficio neto atribuido de 2.306 millones, un 20,1% menos, por la caída de las ventas y por los efectos negativos del tipo de cambio.