La Unión Europea abrió ayer la puerta para la creación de mecanismos comunes a todos los socios comunitarios tendentes a ayudar a los bancos con activos "tóxicos" para impulsar el mercado crediticio, un problema central también en EE UU. Las propuestas, que se presentarán en las próximas semanas, no pretenden establecer una solución única, pero sí principios compartidos.

Entre las propuestas está la de crear "bancos malos" públicos que agrupen esos activos devaluados. Pedro Solbes, ministro de Economía español, pidió que la creación de esos bancos no perjudique a las entidades sanas. Por otra parte, Solbes adelantó que Bruselas va a pedir a España que el déficit público vuelva al 3% en 2011 (este año será del 5,8%).