El impuesto estatal sobre los depósitos bancarios tendrá un gravamen del 0,03%, según anunció ayer la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, lo que permitirá recaudar al menos 340 millones de euros al año teniendo en cuenta el volumen a cierre del ejercicio pasado 2013.

Los depósitos del sector privado residente en España crecieron en 2013 un 3,1%, hasta 1,14 billones, lo que se traduciría en una recaudación de 342 millones de haberse aplicado el gravamen del 0,03%. Por eso, y teniendo en cuenta la evolución al alza de los depósitos en 2014, la previsión es que se recauden más de 342 millones con este nuevo gravamen.

La vicepresidenta explicó que este gravamen, que pagarán los bancos y cuya recaudación irá destinada a las comunidades autónomas, se ha incluido en el decreto-ley de medidas urgentes para el crecimiento, la competitividad y la eficiencia aprobado ayer, aunque tiene efectos desde el 1 de enero de este año.

El impuesto estatal sobre los depósitos bancarios está en vigor desde 2013, pero se mantenía al 0% ya que se creó con el único fin de garantizar la unidad de mercado y evitar que cada comunidad autónoma pudiera tener una tasa propia. Según anunció el Gobierno en su día, el tipo de este impuesto sería muy moderado y no tendría un fin recaudatorio, sino únicamente compensatorio, ya que la ley de financiación autonómica obliga a resarcir a las comunidades que lo tenían y cuya vigencia quedó anulada a partir de la existencia del impuesto estatal.

Las tres comunidades a compensar son Andalucía, Canarias y Extremadura, que son las que lo tenían vigente antes del 1 de diciembre de 2012. Después lo implantaron Cataluña y Asturias.