La tasa española de inflación armonizada , que mide la evolución de los precios con el mismo método en todos los países de la zona del euro, se situó en septiembre en el 2%, dos décimas más que en agosto, y supone la tasa más alta desde noviembre de 2008, que fue del 2,4%.

Así lo refleja el indicador adelantado del Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) difundido este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE) que, de coincidir con la inflación general (IPC), que se conocerá el 14 de octubre, supondría también un aumento de dos décimas en la evolución de los precios de la cesta de la compra.

Según el INE, el dato de la inflación en septiembre se explica sobre todo por el ligero aumento de los precios de los carburantes y lubricantes, productos que bajaron el año pasado.

La subida del precio de los carburantes hizo que el IPCA alcanzase una cota histórica del 5,3% en julio de 2008, pero a partir de ese mes los precios interanuales comenzaron a moderarse hasta llegar a registros negativos por primera vez en marzo de 2009, que se mantuvieron hasta octubre de ese año. Desde entonces, el IPCA ha tenido registros positivos hasta alcanzar su máximo este mes, ya que la tasa anterior más alta fue del 2,4% en noviembre de 2008.

El dato definitivo del IPC general, que se conocerá el próximo 14 de octubre, normalmente no suele variar en más de una o dos décimas del conocido este miércoles. El INE elabora este indicador para incorporarlo al cálculo del índice adelantado del IPCA en toda la zona del euro y lo difunde Eurostat, con el objetivo de ofrecer datos equiparables a los que se elaboran en Estados Unidos.

El indicador adelantado se calcula utilizando la misma metodología que la que se emplea para el cálculo del IPC, con la salvedad de que para el primero se hace una estimación de los datos de los que aún no se dispone en el momento de la publicación.