La Isla está en el Camino. La hermandad del Rocío de San Fernando emprendió ayer, desde la parroquia de la Sagrada Familia, en la barriada Bazán, el largo recorrido hasta la aldea almonteña que realiza cada año en las vísperas de Pentecostés.

Antes, como acostumbran a hacer los romeros isleños, pasearon la carreta blanca con el entrañanble Simpecado marrón carmelita por el corazón de La Isla. Es su particular despedida de la ciudad antes de iniciar una peregrinación que, cada año, cuenta con más adeptos.

De hecho, según los datos facilitados por el hermano mayor de la corporación, Alejandro D. López Corral, la cifra de romeros que este año acompañan a la hermandad durante el camino completo ronda en torno a las 250 personas. Esta participación, evidentemente, se supera durante el fin de semana, ya en la aldea del Rocío, donde se calcula que en torno a unas mil quinientas personas acompañan a la joven hermandad de La Isla en su presentación a la Virgen y en los actos que acompañan a la tradicional romería.

La devoción rociera de los isleños está cada vez más consolidada. El propio hermano mayor de la hermandad lo corroboraba en las declaraciones que realizó a este periódico en las vísperas de su partida al Rocío.

La hermandad de San Fernando. como acostumbra a hacer desde sus orígenes, visitó ayer la iglesia conventual del Carmen tras la celebración de la misa de romero en la parroquia de la Sagrada Familia. A mediodía, el Simpecado llegó al templo de la Patrona, donde se realizó la tradicional ofrenda y se rezó el ángelus. Poco después, tras cruzar la calle Real -que se llenó de los colores y cánticos rocieros- la escena se repitió en la Iglesia Mayor Parroquial, con el Patrón San José. Luego, la comitiva se concentró en La Magdalena, desde donde a la tarde abandonó definitivamente La Isla para dirigirse hacia Sánlucar de Barrameda con la intención de pernoctar en la playa de las Piletas.

Hoy, segundo día de camino para la hermandad de San Fernando, está previsto el embarque en Bajo de Guía y el rezo del ángelus en la playa del Malandar para, a continuación, entrar en el Coto de Doñana. La llegada a la aldea del Rocío está prevista el próximo jueves, en torno a las siete de la tarde. El regreso a La Isla, para el miércoles siguiente.