Antonio José | Cantante

"En el siglo XXI, amores que matan siempre mueren"

"En el siglo XXI, amores  que matan siempre mueren"

"En el siglo XXI, amores que matan siempre mueren" / belén vargas

Antonio José (Palma del Río, Córdoba, 1995) lleva toda la vida encaminando sus pasos hacia su verdadera pasión: la música. Hizo sus pinitos en el mundo del fútbol, pero lo tuvo claro desde el primer momento. Su paso por La Voz lo colocó en un lugar privilegiado en el que se ha sabido mantener gracias a su esfuerzo y dedicación, dignos de todo buen capricornio. Ahora, con tres discos a sus espaldas, Antonio José lanza una reedición de su último trabajo, A un milímetro de ti y cada vez más cerca, que incluye temas inéditos y alguna colaboración.

-En relación con el título de su disco, ¿un milímetro no es demasiado cerca?

-Y porque no puedo más, que si no estaría más cerca todavía. Por eso la reedición del disco tiene la coletilla de y cada vez más cerca.

"Sería un mentiroso si dijese que no me gustaría hacer una colaboración con Alejandro Sanz"

-Se santigua tres veces y besa tres estampitas antes de salir a cantar, éste es su tercer disco -que se publicó un 3 de noviembre-, participó en la tercera edición de La Voz y en la tercera de Eurojunior. Parece que el tres es mucho más que un número para usted.

-Creo que nunca me lo había planteado. De hecho, es la primera vez que me hacen esta pregunta. Pero, si esto quiere decir que el número tres me trae suerte, ojalá que sea así y me la traiga para todo lo que haga.

-Es muy joven pero empezó en la música siendo un niño. ¿Permite la juventud ser dueño de una carrera desde el principio?

-Si tienes tus ideas claras y sabes dónde vas y lo que quieres hacer es todo mucho más fácil. Obviamente tienes que dar con la suerte de tener un equipo que te respalde, que te haga mejor profesional y mejor persona y que, además, sume al proyecto. Pero creo que todo se resume en tener claro lo que quieres ser en la vida, independientemente de que seas más o menos joven.

-Lleva tatuado en hebreo joven eternamente, aunque suene contradictorio, ¿obliga la profesión a mantener un espíritu joven a la par que a crecer a pasos agigantados?

-Creo que sí. Me siento un niño, pero eso va con el alma de la persona. En eso sí creo mucho, en las almas, en las energías... Al fin y al cabo puedes tener todos los años que quieras que, si te sientes joven y con ganas, te puedes echar a la espalda todo lo que quieras porque no vas a tener fronteras.

-¿Llenar un campo de fútbol o una barbacoa dominguera con los amigos?

-Depende. En el ámbito profesional, llenar un campo de fútbol; en el personal, una barbacoa. Las dos opciones las hago. Cuando tengo tiempo de quedar con los amigos lo hago y acabo tocando la guitarra y haciendo tonterías y eso es lo que te hace recordar lo que siempre has sido, tu esencia.

-Ahora que menciona la guitarra y los amigos, ¿quién se cansa antes, el artista de que le pidan que cante o los amigos de que no deje de cantar?

-Creo que el cantante. A mí no me gusta que me digan "illo, cántate algo", a mí me gusta disfrutar del momento. Si estoy con mis amigos y me sale el arrancarme, bien, pero ellos no suelen preguntarme nunca.

-De no haber sido cantante y sabiendo de su afición futbolera y su cariño al Betis, ¿podríamos estar viéndolo compartir terreno de juego con Joaquín?

-(Risas) Hombre, habría sido todo un lujo y más con alguien como Joaquín, al que admiro mucho porque es una gran persona. Me hubiera encantado; además, jugamos en posiciones similares.

-Es muy común que los artistas de su generación colaboren unos con otros, ¿prima más la camaradería que la envidia?

-Creo que sí. Es algo inteligente, además. Ya se pasó la moda del artista que se encasilla como único solista o como grupo. La música está para compartirla y todos nos hemos dado cuenta. Cuando compartes, enriqueces más tu música, a ti y al otro artista. Pero no sólo por eso. También reúnes a tus seguidores con los de la otra persona y eso es muy bonito.

-Toca volver a elegir. ¿Un dueto con Alejandro Sanz o poder cantar con su madre un ratito todos los días?

-Inteligentemente, te diría que un dueto con Alejandro Sanz, porque lo admiro muchísimo. Pero el cariño de una madre es incomparable con nada y con ella me quedo para cantar y para lo que sea. Si me pones a elegir entre familia y trabajo, ahí ya el pie cojea. Pero sería un mentiroso si dijese que no me gustaría hacer una colaboración con Alejandro Sanz.

-Dicen de los capricornio que son decididos, melancólicos y prácticos. ¿Es usted un capricornio de manual?

-Soy cabezota y cuando me propongo algo lo consigo. Me gusta dedicarle mucho tiempo a todo lo que hago, soy muy meticuloso. No sé si eso tiene que ver más con el horóscopo o con mi personalidad.

-¿Cuando se escucha en la radio dice lo mismo que el resto de los mortales cuando oímos nuestra voz grabada?

-No me suele dar por escucharme, no me gusta. De hecho, me oigo tan poco que no tengo rutina y se me olvidan las letras de mis canciones. Pero no es un ejercicio que me guste hacer.

-Tiene un gato al que adora, ¿el amor se parece a un perro pero en realidad es un gato?

-El gato es más arisco pero puede ser que sí. También depende del amor que sea. Hay amores que matan y nunca mueren, pero en el siglo XXI amores que matan siempre mueren.

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