El secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, aseguró que la banda terrorista ETA atraviesa "una fuerte división interna" y que sus jefes "son contestados internamente", algo que "multiplica los fallos en su estrategia". Así, remarcó que "se puede concluir que la organización está más débil que nunca", aunque aún "mantiene su capacidad" y su "voluntad de matar", por lo que no hay que relajar la seguridad.

En una entrevista concedida a la revista de la Fundación Víctimas del Terrorismo, Camacho reiteró que "ETA tiene una fuerte división interna que cada detención agrava. Por eso, cada vez les cuesta más consolidar una estructura de mando sólida y sus jefes son contestados internamente, lo que multiplica los fallos en sus estrategias". "A partir de ese análisis, se puede concluir que está más débil que nunca. Pero quiero subrayar que mantiene la capacidad y, sobre todo, la voluntad de matar y aterrorizar a nuestra sociedad", agregó.

El número dos del Ministerio de Interior recordó que en las dos últimas legislaturas "han sido detenidos más de 830 miembros o colaboradores de ETA". No obstante, aseguró a todos los amenazados por el terrorismo que "mientras exista ETA, se mantendrá intacta su protección". "Es importante no perder de vista que ETA sigue intentando matar y causar el mayor sufrimiento posible en nuestra sociedad y que, por lo tanto, no podemos equivocarnos, ni mucho menos relajar las medidas de seguridad".

En este sentido, garantizó que "cualquier persona que por desgracia se encuentre amenazada por ETA contará con la protección necesaria para garantizar su seguridad". "El mensaje a las víctimas sólo puede ser de agradecimiento, por su sacrificio, y de esperanza, porque ese sacrificio es el que sostiene nuestra legitimidad y nuestra fortaleza para  seguir combatiendo a los terroristas hasta una derrota definitiva que cada vez está más cerca", recalcó.

En cuanto a la posibilidad de que la banda pueda llevar a cabo un secuestro, Camacho señaló que se trata de una "hipótesis con la que trabajan las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que se basan en datos objetivos". A este respecto, el secretario de Estado dijo que "cada vez que ETA se ve acorralada intenta demostrar poderío". "Un secuestro permitiría a ETA demostrar que sigue viva y es capaz de actuar y a la vez de ganar tiempo para cerrar su debate interno", indicó.

Respecto a la colaboración de Francia en la lucha antiterrorista, aclaró que "Francia entiende a la perfección qué significa ETA y cómo se la combate desde la más estrecha colaboración policial y judicial. Frente a ETA, Francia y España actúan como un solo país y con una única estrategia compartida". Camacho hizo referencia a la muerte del gendarme galo Jean Serge Nerin y explicó que "no hay ninguna diferencia entre esa víctima y los casi 500 miembros de las Fuerzas Armadas y de las Fuerzas de Seguridad Españolas que han sido asesinados por la banda. Todos ellos han muerto por defender la libertad". 

Camacho señaló que la cooperación internacional es cada vez más efectiva en la lucha contra ETA, también en Iberoamérica. No obstante, no quiso mencionar el caso de Venezuela, pero admitió que "es verdad que en ocasiones surgen dificultades puntuales sobre asuntos concretos, pero el nivel de colaboración con los países iberoamericanos frente a ETA es cada vez mejor".

Por último, el secretario de Estado se refirió a las amenazas de terrorismo islamista en el norte de África. Así, abogó por "redoblar la presencia de la Unión Europea en la zona" e intensificar la "cooperación al desarrollo" combinándola con la colaboración policial.