España

Montoro afirma que la próxima reforma fiscal será "la de reducir impuestos"

  • El ministro de Hacienda dice que la bajada de la fiscalidad para "los que menos rentas tienen" será posible por las nuevas bases imponibles generadas por la ley antifraude.

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha asegurado que la próxima reforma fiscal que acometerá el Gobierno será "la de reducir la fiscalidad a los que menos renta tienen y para las capas medias", lo que comenzará -ha recordado- con la aplicación del IVA de caja a pymes y autónomos desde enero de 2014.

Durante la sesión de control en el Congreso, ha dicho que esa reforma fiscal será posible porque habrá crecimiento económico y que a ello contribuirá el afloramiento de bases imponibles como consecuencia de la lucha contra el fraude fiscal. A este respecto, ha recordado que la obligación de declarar las cuentas y bienes en el extranjero ha permitido en abril ensanchar la base imponible en 87.300 millones de euros.

Montoro ha hecho estas consideraciones después de que el diputado socialista Pedro Saura le preguntara cuáles eran las intenciones del Gobierno respecto al IVA y asegurara que si Montoro anuncia una reforma fiscal "los españoles se pueden echar a temblar". En opinión de Saura, lo que tiene que hacer el Ejecutivo es aumentar en 1.000 empleados la plantilla de los inspectores de Hacienda y acabar con los 90 millones de billetes de 500 euros que están en circulación. "Lo que no pagan los de la amnistía fiscal lo tenemos que pagar los demás", le ha echado en cara Saura.

Montoro defiende el papel de las diputaciones y acusa a UPyD de "desconocimiento" y "ligereza"

El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha defendido el papel de las diputaciones provinciales y ha acusado a Unión, Progreso y Democracia (UPyD) de "desconocimiento" y "ligereza" por criticar el presupuesto que tienen asignado y denunciar que es superior a la inversión en I+D+i y becas en educación. Montoro y el diputado de UPyD Carlos Martínez Goarriarán se han enzarzado este miércoles en el Pleno del Congreso respecto a la función de las diputaciones, que el Gobierno prevé que asuman competencias de los ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes que no cumplan los baremos de calidad establecidos.

Gorriarán ha denunciado que las diputaciones son las únicas administraciones que han aumentado su deuda en los últimos ejercicios, creciendo ésta un 34 por ciento desde el año 2008 cuando al resto se le exige reducción del déficit y consolidación fiscal. En este sentido Montoro, aunque ha reconocido que "no hay justificación" para este aumento, ha recordado que su valor en términos absolutos es "muy bajo" y las diputaciones han pasado de 4.000 millones de euros de deuda a 6.400 millones, por lo que no se les puede achacar el problema de deuda que sufren el conjunto de administraciones públicas españolas.

"Nadie dice si son o no el origen del problema, pero el hecho es que es la única administración que incrementa año tras año su deuda", ha respondido el diputado de la formación magenta, que ha recordado que las diputaciones son administraciones "sin apenas competencias" y en las que el 80 por ciento del gasto corresponde a gastos corrientes y de personal. En este sentido, ha denunciado que se trata de la única administración territorial cuyos miembros no son elegidos y que no tiene "ningún control democrático". De esta forma, las ha calificado de "nido de opacidad y de corrupción" y ha puesto como ejemplo la Diputación de Orense, en la que el que fuera su presidente durante 25 años, José Luis Baltar, está siendo investigado por prevaricación.

Montoro: "Hay voluntad política de normalizar las relaciones con Generalitat"

Ha manifestado  "la voluntad política" del Ejecutivo de llevar adelante todos los procedimientos para la normalización absoluta de las relaciones entre la Generalitat de Cataluña y la Administración central. Montoro ha respondido en el Pleno del Congreso a una pregunta del diputado socialista Francesc Vallés sobre si contempla el Gobierno la convocatoria inminente de la Comisión Bilateral Generalitat-Estado.

Tras reconocer que está pendiente la convocatoria de ese foro, el ministro ha confiado en que "pronto" pueda celebrarse. El diputado ha recordado que hace dos años que no se reúne y ha añadido que desde que gobierna el PP sólo ha habido tres reuniones entre los presidentes del Ejecutivo y de la Generalitat. "La primera -ha agregado-, para saludarse. La segunda sirvió de excusa para convocar elecciones anticipadas en Cataluña y la tercera fue secreta". Vallés ha señalado que el listado de asuntos para tratar es "interminable", ya que quedan, "al menos", 29 competencias por transferir; el Estado "debe" a Cataluña 8.000 millones de euros entre liquidaciones pendientes y la financiación de los servicios sociales y aún no se sabe cuál va a ser el límite de déficit.

El diputado ha insistido en que todos esos asuntos son competencia del Departamento de Montoro y se ha referido a los "conflictos institucionales inéditos en la historia de la democracia de este país", en el que "la tensión aumenta y ustedes no se mueven". En su opinión, ha llegado el momento de reunirse y de hacer una "política institucional urgente" a través de los mecanismos bilaterales y de cooperación entre el Estado y Cataluña.

El ministro ha asegurado que el Gobierno desarrolla "todos los instrumentos" para asegurar la financiación de los servicios públicos de los catalanes, como el Fondo de Liquidez Autonómica. Ha celebrado que los socialistas catalanes quieran "estimular el clima de entendimiento" y ha reconocido que los asuntos citados están en la agenda política del Ejecutivo.

Montoro ha señalado que también "se han precipitado acontecimientos" en esa agenda política que no han hecho posible la reunión, ni había "el clima conveniente". "Una vez que vayamos despejando esas variables, la primera la definición de los objetivos de déficit para 2013 para Cataluña y el resto de comunidades, estaremos en condiciones de seguir avanzando en ese proceso de normalización", ha precisado Montoro, quien ha insistido en que el objetivo principal es salir de la crisis.

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