España

El PNV deja de colaborar con el Gobierno por la anulación de Bildu

  • Urkullu dice que la decisión del Supremo es "de extrema gravedad" y forma parte de una estrategia del PSOE y el PP para conseguir beneficios para su coalición en el País Vasco.

Ya lo había avisado: si Bildu no llegaba a las urnas, habría consecuencias. Iñigo Urkullu, presidente del EBB del PNV, llevó la advertencia a la práctica cuando trasladó al Gobierno que, a partir de este momento, suspende "toda colaboración y apoyo" de su formación para las "nuevas iniciativas" del Ejecutivo socialista. Los nacionalistas vascos entienden que el equipo de José Luis Rodríguez Zapatero es responsable de la anulación de las candidaturas de la coalición abertzale, porque fue él quien promovió "la tesis en la que se ha fundamentado la resolución del Tribunal Supremo (TS)".

Lo anunció Iñigo Urkullu, que ya había advertido de que, si las listas eran anuladas, su partido tomaría unas represalias que afectarían directamente a los Presupuestos Generales del Estado para 2012. El grupo nacionalista va a respaldar "en el ámbito político, institucional y jurídico la revocación de esta decisión" de no permitir que Bildu concurra en las elecciones. Así, continuará "defendiendo la participación política plena de todas las opciones, incluida la de la izquierda abertzale tradicional, sea de manera propia o inserta en estrategia compartida con otras formaciones legales".

En base a estos principios, el partido se va a plantear trasladar esta decisión "ante las máximas instancias institucionales, políticas y judiciales europeas". No obstante, mantiene la esperanza de que el Tribunal Constitucional (TC), "al formar su criterio jurídico, tome en consideración la opinión mayoritaria de la sociedad vasca y, en consecuencia, revoque la sentencia del TS". El Tribunal de garantías recibirá el recurso de la coalición de Eusko Alkartasuna (EA), Alternatiba e independientes, de modo que el futuro de sus candidaturas quedará en sus manos.

Urkullu sostuvo que el año 2011 "se inició con una nueva esperanza para Euskadi". El alto al fuego llegaba el 10 de enero y le seguía "el fin de la extorsión que supone el llamado 'impuesto revolucionario'". Con la promesa de no-actuación de la banda ("un elemento relevante, pero no el trascendental"), el País Vasco tenía la posibilidad "de afrontar un nuevo tiempo de convivencia política", más aún cuando, el 7 de febrero, "la izquierda abertzale tradicional oficializaba su apuesta por las vías exclusivamente políticas y democráticas".

Así es como el colectivo "reflejaba su compromiso con su apuesta por la identificación en un nuevo partido político, Sortu, y con unos estatutos escrupulosamente democráticos y de rechazo de la violencia". El PNV "ha saludado durante este tiempo estas noticias y, al igual que la inmensa mayoría de la sociedad vasca, las enmarca en la dirección correcta, en la dirección de la paz y la normalización". Eso sí, "con todas las cautelas y prevenciones necesarias", sobre todo en lo referente a la organización terrorista. 

"Como primer partido político de Euskadi, desde el principio hemos constatado y valorado la oportunidad que estos pasos ofrecen para finalizar con medio siglo de violencia terrorista de ETA". Esto permitiría... "Iniciar en Euskadi un nuevo tiempo que nos acerque, desde la deslegitimación de la utilización de la violencia y desde el rechazo a la misma, a una nueva convivencia que resulte en una paz verdadera".

A juicio de los nacionalistas, "la izquierda abertzale tradicional ha dado exactamente los pasos que la sociedad y el conjunto de los partidos políticos" le reclamaban. Esto es, "ha comunicado su rechazo a la violencia y el terrorismo como medio para el logro de fines políticos; ha explicitado públicamente su rechazo a la violencia y, por lo tanto y de manera expresa, a ETA; y ha aceptado la Ley de Partidos, siendo consciente de la modificación de la Ley de Régimen Electoral (Loreg)".

En relación con esto, Sortu era "un nuevo partido político con estatutos democráticamente intachables", a ojos del PNV, que lamenta que el TS también impidiese que esta organización llegase a las urnas.

Bildu agrupa a personas "independientes y libres"

En cuanto al caso particular de Bildu, Urkullu defendió que sus integrantes son personas "independientes, libres, que se han comprometido colectiva e individualmente con las vías exclusivamente políticas y democráticas" y que "han rechazado expresamente la violencia, incluida la de ETA". El hecho de que sus candidaturas no fuesen validadas indigna al PNV, que critica "una estrategia tramposa que busca exclusivamente el beneficio electoral a corto plazo del pacto PSOE-PP" para el País Vasco.

A su modo de ver, el poder ejecutivo "no se puede escudar en que se trata de una decisión judicial". De nuevo, el líder nacionalista dijo que "el Gobierno español ha tomado la decisión de impugnar todas las candidaturas" y que ha sido él quien "ha retomado la teoría de que todo es ETA". Urkullu defiende que "no tiene sentido político impedir que (sus miembros) participen cuando han cumplido con todos los requisitos exigidos (...) No tiene sentido político conculcar los derechos y principios democráticos individuales y colectivos". 

A su modo de ver, "la política es el presente y el futuro de Euskadi, como corresponde a toda sociedad democrática", una Euskadi que "reclama el respeto a los principios y a los derechos democráticos fundamentales". El dirigente explicó que "el primer derecho, además del derecho fundamental humano como es el de la vida (...), es la libertad y la participación política".

Por todo ello, y en "defensa" de estos principios, el PNV considera de "extrema gravedad" la no legalización de las candidaturas presentadas por Bildu para las próximas elecciones municipales, forales y al Parlamento navarro. Y, por todo ello, cumple sus advertencias y retira su apoyo al Gobierno central. Lo había anunciado el propio Urkullu; su partido tendría "muy, muy presente" la decisión que se tomase con respecto al futuro de Bildu, porque "no hay justificación para que no haya participación política plena".

El dirigente del PNV habló este domingo con Alfredo Pérez Rubalcaba, vicepresidente primero del Ejecutivo y ministro de Interior, según anunció este último: "Fue una conversación correcta e interesante. Escucho lo que me dice porque me parece que todo lo que dice siempre merece una reflexión". Después de conocer la decisión del TS, el 'número dos' de Zapatero también habló con Federico Trillo, responsable de Justicia del PP.

Los nacionalistas se reunirán con Bildu

El PNV se reunirá el próximo miércoles con representantes de Bildu, dentro de la ronda que la coalición electoral inició la pasada semana para recabar apoyos, confirmaron fuentes de la formación jeltzale. La agrupación de EA y Alternatiba dio comienzo a este proceso una vez se conoció la decisión de la Fiscalía y la Abogacía del Estado de impugnar sus listas.

Bildu ya ha mantenido encuentros con formaciones como EB y Aralar, y les planteó la celebración de concentraciones en caso de que el TS no le permitiera concurrir a los comicios municipales y forales.

La formación que preside Iñigo Urkullu ya ha adelantado que no participará en las protestas que la coalición electoral ha convocado para este martes, aunque no ha precisado los motivos que le han llevado a adoptar esta decisión.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios