La capilla ardiente con los restos mortales de Eduardo Antonio Puelles García, el agente del Cuerpo Nacional de Policía asesinado ayer por ETA en Arrigorriaga (Vizcaya), se ha vuelto a abrir hoy a las 10:00 horas en la subdelegación del Gobierno en Bilbao después de que se cerrara ayer a las 21:00 horas.

El Ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha llegado a la capilla cinco minutos después de su apertura, al igual que han hecho muchos ciudadanos que han acudido a la subdelegación del Gobierno en el País Vasco para expresar su apoyo a los allegados de Eduardo Puelles García.

Asimismo, está previsto que durante la mañana acuda a la capilla la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de la Presidencia, María Teresa Fernández de la Vega.

La capilla permanecerá abierta hasta poco antes del inicio del funeral, que se celebrará a las 13:00 horas en la iglesia de San José, situada a una veintena de metros de la sede de la subdelegación del Gobierno en la capital vizcaína.

A los oficios religiosos por el policía asesinado asistirán, entre otras autoridades, los Príncipes de Asturias.

A lo largo de la mañana, el Gobierno vasco ha convocado varias concentraciones frente a las Instituciones para condenar el atentado, entre ellas la que se celebrará a las 12:00 horas frente al Ayuntamiento de Arrigorriaga (Vizcaya) y la que asistirá el lehendakari, Patxi López.

Además, a partir de las 18:00 horas una manifestación, también convocada por el Ejecutivo vasco, recorrerá las calles de Bilbao con el lema 'Por la libertad. ETA NO. Askatasuna (libertad)'.

Ayer, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero impuso en la capilla ardiente la medalla de Oro al Mérito Policial a Eduardo Puelles García.

En la ceremonia de la imposición de la medalla, el presidente del Gobierno, acompañado por el lehendakari, Patxi López, estuvo con la viuda, los dos hijos y más familiares del agente del Cuerpo Nacional de Policía.

En la capilla también estuvieron el líder de la oposición y presidente del PP, Mariano Rajoy; los máximos responsables de Interior de los Gobiernos central y vasco, Alfredo Pérez Rubalcaba y Rodolfo Ares, respectivamente; el ex lehendakari Juan José Ibarretxe; y el presidente del PP del País Vasco, Antonio Basagoiti, entre otros.