María san gil

San Gil: "La 'política pop' y ser simpático no da más votos al PP vasco"

  • La antigua dirigente popular asegura que estaría encantada si pudiera reconocer que los motivos que le llevaron a dejar el partido fueron equivocados

La ex presidenta del PP del País Vasco María San Gil asegura que "ojalá" pudiera reconocer que cometió un error al abandonar su cargo en el partido y alejarse de la primera línea, pero considera que ahora está demostrado que "la política pop" y "ser más simpático" no da más votos a los populares vascos. Esa expresión, "política pop", fue la que se acuñó hace unos años para definir la nueva dirección de la renovada cúpula del PP de Euskadi, la que encabezan actualmente Antonio Basagoiti e Iñaki Oyarzábal pero que, remarca su antecesora al mando del partido, no ha ayudado a revitalizar el papel de los populares vascos.

Según señala en una entrevista a Efe con motivo de la presentación de su libro de memorias, En la mitad de mi vida, de la editorial Planeta, ella estaría encantada de poder reconocer "sin rubor" que los motivos que la empujaron a dejar la organización y a quedarse en casa "callada y al margen de todo" fueron equivocados.

Recuerda que tras la derrota electoral de 2008, Mariano Rajoy y todo su nuevo equipo plantearon un cambio de rumbo en el PP que conllevaba, también, un viraje en la trayectoria de los populares vascos, tal y como quedó reflejado en el congreso de Valencia de ese mismo año.

San Gil no estaba de acuerdo con ese nuevo enfoque, y por ello, y después de lo que ella llama en su libro "una tomadura de pelo", optó por no aspirar a la reelección como presidenta del PP.

Se abrió paso la denominada "política pop" de Basagoiti, que consiste, según San Gil, en "ponerse de perfil y ser más simpático" con el objetivo de conseguir más votos.

La estrategia remozada, en su opinión, no ha cuajado, toda vez que en 2001 el PP vasco, de la mano de Jaime Mayor Oreja, obtuvo 310.000 papeletas, y en 2005, con ella al frente, 210.000. De acuerdo con sus datos, Basagoiti perdió en 2009 un total de 80.000 votos.

"Y cada voto que pierdes en Euskadi cuesta mucho recuperarlo", asegura antes de explicar: "Yo también digo que es mejor ser más simpática, pero me tocó hacer un papel horrible que, no obstante, asumí. Me querían oír hablar de España, de que la sociedad vasca es plural y puede salir adelante, y que no me achanto ante los nacionalistas. A algunos sentaba mal ese mensaje, pero es donde teníamos que estar".

Sobre Rajoy, más allá de lo que escribe en su libro, como por ejemplo que "no es un líder claro", María San Gil señala que más que alegrarse por él a raíz de sus recientes éxitos electorales, se alegra por el Partido Popular, "la única alternativa" a un Gobierno, el de José Luis Rodríguez Zapatero, que ha llevado a España "a la deriva" y a que los ciudadanos "no aguanten un minuto más".

Le gustaría creer, subraya, que con Rajoy en el poder comenzará a debilitarse el brío del proyecto del PNV en el País Vasco, pero, a su juicio, para ello, "hay que hacer un acto de fe". "Había líneas rojas desde la oposición que no se iban a pasar, pruebas del nueve, pero eso no se ha producido, y si así actúas en la oposición, es difícil que cambies en el Gobierno", añade.

"Creo que Mariano podría ser un mejor líder", remata.

Esas impresiones son muy distintas cuando se le pregunta por el ex presidente José María Aznar, con quien habla con frecuencia, aunque no le cuenta mucho, apostilla. "Es un político al que admiro y respeto: nos enseñó a hacer política en momentos complicados y nos hizo sentir orgullosos de estar en un partido que defendía un proyecto de una España en la que podíamos vivir mejor, quizás no materialmente, pero desde luego que sí éticamente", sentencia.

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