La entrevista se celebra por teléfono, a medio camino entre Huelva y Cádiz. Es un jalón más a sumar a los 40.000 kilómetros que asegura haber recorrido en coche desde que se inició el proceso de relevo de Rubalcaba. Pasa por ser el candidato más moderado de los tres que se presentan. El día 13 se sabrá si es el elegido.

-¿Lo suyo es una carrera sin freno?

-(Risas). No, esto es trabajo, trabajo y trabajo. Estamos trabajando para que el PSOE salga fortalecido, esté unido y vuelva a cautivar a la sociedad española.

-¿Le preocupa ser un desconocido?

-En absoluto. Soy un político de 42 años que ha entrado hace poco en política. He trabajado por cuenta ajena y he sido autónomo, he sufrido el desempleo juvenil y he sido concejal en el Ayuntamiento de Madrid. Ahora tengo la fortuna de ser diputado en las Cortes y soy diplomado universitario en Economía. Mi objetivo es dar más peso a los militantes y que éstos puedan exigir el cumplimiento de sus responsabilidades a los dirigentes del partido. Y ahí voy a estar.

-Tampoco se conocen los programas de los tres candidatos. ¿Qué les diferencia?

-Creo que hay que articular un discurso económico de izquierdas alternativo al del PP. España necesita un cambio.

-Describa su alternativa.

-Es urgente una regeneración de la vida política. Eso pasa por que el Estado regule los partidos con una nueva ley que establezca la limitación de mandatos, la paridad, las primarias abiertas obligatorias, la descolonización por parte de los partidos de las instituciones del Estado (por ejemplo, el Tribunal de Cuentas) y prohibir la financiación privada de los partidos.

-Usted también aboga por reformar la Constitución.

-Sí, definitivamente hay que dar un paso hacia una España federal que resuelva el conflicto territorial que está planteando el independentismo catalán. Ahora bien, la soberanía nacional reside en el pueblo español. No voy a defender un referéndum ilegal por muy pactado que sea. El reconocimiento de la rica diversidad de los pueblos de España no puede anteponerse a la solidaridad e igualdad entre ciudadanos y territorios.

-En este contexto, su partido defiende una reforma de la financiación autonómica. ¿En qué sentido?

-El actual modelo imposibilita el sostenimiento de los servicios esenciales como la educación, la sanidad o la justicia, por lo que el Gobierno debe poner sobre la mesa un único modelo de financiación que reconozca todas las especificidades de los territorios de España.

-El modelo vigente fue aprobado por un Gobierno socialista.

-Sí, y hay que reconocer que necesita ser mejorado.

-¿Cataluña y País Vasco son diferentes o debe haber café para todos?

-La Constitución reconoce el carácter especial de esos territorios y yo respeto esa singularidad. Tenemos que ponernos de acuerdo en unas normas de convivencia, decidir qué hacemos con el Senado para convertirlo en una auténtica cámara de representación territorial donde se diriman todas las cuestiones que afecten a las comunidades autónomas. Si no lo logramos, mejor será cerrarlo.

-Usted quiere una España federal. ¿También monárquica?

-(Pausa). Hay que atender a lo que es urgente: regenerar la vida política, hacer de España un estado federal y blindar en nuestra Constitución la sanidad y la educación públicas. Y al nuevo Monarca hay que pedirle ejemplaridad y transparencia, que contribuya a la consolidación de los derechos y valores de la Constitución.

-Por lo tanto, la monarquía encaja en su modelo de España.

-Sí.

-Los otros dos candidatos a la secretaría general se manifiestan abiertamente republicanos. ¿Usted no está en esa posición?

-Yo creo que la política debe resolver lo urgente: la crisis territorial, la crisis económica y la crisis institucional.

-Según el CIS, el paro es el primer problema para los españoles.

-Hay que ir hacia una transición económica donde los sectores turístico e industrial sean el futuro, especialmente en el caso de Andalucía. La situación económica está situando a la sociedad española ante su principal desafío, la desigualdad. Medidas adoptadas en Andalucía como el plan de garantía alimentaria o el decreto de lucha contra el desempleo juvenil deben ser extrapoladas a España.

-El segundo problema es la corrupción.

-Por eso es necesaria una regeneración de la vida política y la desaparición de la financiación privada de los partidos. Mire lo que está pasando en el PP con sus ex tesoreros imputados. Le puedo asegurar que no me va a temblar la mano para echar a un corrupto del PSOE.

-Se lo habrán dicho miles de veces: usted es el candidato de Susana Díaz.

-Yo soy el candidato a secretario general de miles de militantes del PSOE. Me siento muy orgulloso y agradecido del apoyo que me han dado los compañeros y compañeras del PSOE de Andalucía, como lo estoy del que me han dado en otros territorios. Siempre he dicho que el partido en Andalucía debe ser pieza central del cambio que estoy impulsando.

-¿Usted es el más centrista o el más centrado de los tres candidatos?

-(Risas). Yo soy socialista por los cuatro costados.

-¿Pero le adelanta alguien por la izquierda?

-Escúcheme, cuando yo nací ya estaba el carné del PSOE en la mesa de mi casa. Mi padre es militante y mi madre es socialista. He estudiado en un colegio público y practico lo que digo. Creo en un Estado laico donde el poder público intervenga en la economía, creo en un radicalismo democrático propio del socialismo y creo que el principal desafío de la sociedad española es la desigualdad. Eso es puro socialismo.

-¿Están siendo estas primarias un proceso limpio? Pérez Tapias, por ejemplo, afirma que no tiene acceso al censo de militantes.

-Estamos ante un momento histórico, en el que los militantes vamos a poder votar por primera vez a nuestro secretario general. El proceso está siendo ejemplar, con la exposición de las propuestas de cada uno, y representa el proceso de transformación que el PSOE quiere para España. No somos la izquierda que protesta, sino la que ofrece soluciones.

-¿Sobran aforados?

-Claramente.

-¿A quiénes quitaría ese privilegio?

-Tenemos que revisar a fondo ese privilegio para que esté sólo vinculado al ejercicio de la actividad política y, si me pide mi opinión, yo estaría dispuesto a retirar el aforamiento de todos los diputados y diputadas.

-IU ha lanzado un guiño a Podemos. ¿Lo hará el PSOE?

-Miro con respeto todas las opciones políticas existentes, pero el PSOE tiene su propia línea política dentro de la izquierda.