Cuando Benito Zambrano dirigió Solas (1999) el Festival de Cine de Sevilla no existía. “No existía ni yo”, bromea el cineasta en la Filmoteca nacional, donde este viernes al mediodía se ha presentado la cita con el cine europeo que celebrará su edición número 16 entre el 8 y el 16 de noviembre en la capital hispalense. La película con la que debutó Zambrano fue entonces premiada en la Berlinade,  marcó un punto de inflexión y proyectó el cine español, y el andaluz, a todo el mundo. Pero veinte años después es la primera vez que el director lebrijano competirá oficialmente en el Festival de Sevilla. Con Habana Blues fue a Cannes,  con La voz dormida estuvo en San Sebastián y acaba de regresar de la Semana de Valladolid con su última obra, Intemperie, con la que se presenta también en Sevilla con muy buenas vibraciones. Un salto de dos décadas en las que el sector del cine se ha convertido en toda una industria en Sevilla.

La ciudad se ha consolidado ya en el circuito de festivales de cine del mundo. Lo demuestran sus cifras: más de 220 películas, 117 estrenos nacionales y 35 mundiales, 465 proyecciones, 160 coloquios, 30 actividades paralelas y más del 76.000 espectadores en la última edición (un alto porcentaje ya no es público local), de ellos 28.000 público joven. Pero también es una confirmación la valoración que recibe cada edición. Este año ha sido el festival mejor puntuado en la convocatoria de subvenciones del Ministerio de Cultura, según ha confirmado Jaime Alejandre, subdirector de promoción y asuntos internacionales.

El de Sevilla es este año el festival mejor puntuado en la convocatoria de subvenciones del Ministerio de Cultura

“Estamos muy impresionados por la evolución de Sevilla en la industria del cine: nunca se han visto tantas películas del cine español con Sevilla como escenario y a nivel de producción ha dado un salto gigante, lo demostró el año pasado con el propio festival y también con la ceremonia de los Goya, que fue un éxito gracias a la ciudad y a su implicación”, comenta Rafael Portela, vicepresidente de la Academia del Cine, también presente en el acto celebrado en Madrid y que ha reunido a la gente del cine, un centenar de personas entre directores, actores y productores de las películas españolas que se presentarán en el festival, como Madre, Una vez más, Intemperie, Violeta no coge el ascensor, Adiós o la segunda temporada de la serie La Peste.

Sevilla es una ciudad de cine, un eslogan que tiene su traducción en los efectos que esta pujante industria tiene en la capital. Un perfecto maridaje, en palabras de Muñoz, que el año pasado atrajo a  eventos relacionados que sumados a los rodajes elevaron a 20 millones de euros el impacto económico en la ciudad.

El concejal Antonio Muñoz con la actriz Marta Nieto.

Son datos que animan al Ayuntamiento de Sevilla a seguir apoyando a esta industria, esperanzado también en los efectos de la futura Ley Andaluza del Cine y la creación de la Academia del Cine de Andalucía, cuya sede ha reivindicado el concejal de Cultura, Antonio Muñoz. “En un momento en el arrecian los nacionalismos miopes por toda Europa, llevamos a gala la etiqueta de europeos, de cine hecho en el viejo continente”, ha comentado el edil.

Sevilla ha dado un salto cualitativo en este sector y también lo ha dado el propio festival, que es un referente en el sector. No en vano, cada año este festival acoge el anuncio de las nominaciones de la EFA (European Film Academy) y los directores más celebrados eligen esta cita para presentar en España sus últimas películas. Es el caso de Roy Andersson, Marco Bellocchio, Nadal Lapid o Corneliu Porrumboiu.

Muñoz ha querido también destacar el especial protagonismo de las producciones españolas, con una presencia en la que “confluirán un cine rompedor, que se adelanta a su tiempo y propone nuevos lenguajes, y otro de nombres consolidados de la dirección y la interpretación, y que ya han logrado llevar nuestro cine por todo el mundo”.

El director del festival, José Luis Cienfuegos, ha destacado también la variedad y frescura del cine europeo, que muchos siguen pensando como algo ensimismado. La programación incluye desde thrillers a comedias. Hetereogéneo y heterodoxo. Y Muñoz ha añadido que el ambiente de cercanía que viven los cineastas con el público en Sevilla crea un ambiente diferente y my singular.

El Premio Ciudad de Sevilla recaerá este añio en la actriz y cineasta francesa Jeanne Balibar

Durante la presentación, Cienfuegos ha resumido los principales contenidos del Festival, desvelando algunos de los últimos secretos de la programación, como el Premio Ciudad de Sevilla, que este año recaerá en la actriz de cine y teatro, cantante y cineasta francesa Jeanne Balibar, los jurados de las diferentes secciones y los detalles de las diversas galas de esta edición.

Como actividad complementaria, del 7 de noviembre al 10 de diciembre podrá verse en el Antiquarium la exposición de fotografía Los cineastas, Europa retratada, un proyecto del fotógrafo Óscar Fernández Orengo. Los responsables del festival también han destacado la apuesta por el público joven con una programación diseñada parea escolares y también por el cine español.

Un fallo técnico dejó al público asistente a la presentación sin poder oír, sí ver, el spot que este año anuncia la cita, una creación de Paco Campano. No hizo falta para que muchos de los invitados confirmaran su asistencia al festival, como Marta Nieto, actriz de Madres, premiada en el Festival de Venecia.