Lamentaba no hace demasiado Pere Portabella, durante una visita precisamente al Festival de Cine de Sevilla, que siempre se ha sentido más reconocido fuera que dentro de España. Desde este lunes, este personalísimo cineasta muy ligado también a la actividad política tiene, al menos, un motivo para sentirse reconfortado al respecto, pues el mismo SEFF donde en 2016 presentó su Informe general II: El nuevo rapto de Europa acaba de anunciar que el director catalán recibirá el Giraldillo de Honor del certamen en reconocimiento a su "cine militante y visionario".

Así lo ha anunciado esta mañana el festival, en un acto al que han asistido el delegado de Hábitat Urbano, Cultura y Turismo, Antonio Muñoz, la directora general de Cultura del Ayuntamiento, Isabel Ojeda, y el director del SEFF, José Luis Cienfuegos. Portabella, ha asegurado Cienfuegos, es una "figura fundamental de la política, la cultura y el cine de este país en los últimos 50 años". Pese a lo cual, ha añadido, no ha recibido apenas reconocimientos de importancia fuera de Cataluña, donde su obra sí ha tenido más eco institucional. De hecho, ha afirmado el director del festival sevillano, ésta será "la primera vez" que Portabella reciba un homenaje "de estas características", es decir, en el marco de una cita "de la dimensión" del SEFF.

Cabría explicar atribuir este vuelo de Portabella por debajo del radar mediático mayoritario a la naturaleza experimental de su cine, que sí ha contado con mucho predicamento en canales más especializados, desde los propios festivales hasta un amplio circuito de museos y galerías de arte nacionales e internacionales.

El cineasta y político catalán Pere Portabella (Figueras, 1927).

Activista antifranquista en las filas del PSUC, miembro del Senado resultante de las primeras elecciones democráticas, diputado del Parlamento catalán y en la actualidad presidente de la Fundación Alternativas, Portabella se inició en el mundo del cine como productor de tres directores de la enverdura de Luis Buñuel, Carlos Saura y Marco Ferreri. A los tres les produjo, respectivamente, Viridiana, Los golfos y El cochecito. Estas tres películas esenciales del cine español de los años 60, recientemente restauradas, se proyectarán en el SEFF dentro de las actividades de homenaje al cineasta y político catalán.

A finales de los años 60, Portabella comenzó a dirigir sus proyectos proyectos. Esta faceta la inició con No contéis con los dedos (1967) y tiene una de sus piedras de toque en el documental Informe general sobre unas cuestiones de interés para una proyección pública (1977), un documental sobre la España de la Transición que para no pocos críticos pasa por ser uno de los más decisivos e influyentes hitos del cine político nacional. Dentro de un ciclo programado en el Festival de Sevilla se verán otros tres títulos de su filmografía no menos representativos, buenas muestras de su cine ajeno a las convenciones y tocado por el surralismo y la poesía y en cualquier caso empeñado siempre en aspirar a la verdad documental: Cuadecuc, vampir (1970), El Sopar (1974) y El silencio antes de Bach (2007).