Festival Cine Málaga

'Trash' o cómo tocar fondo entre sexo, drogas y rock

  • Carles Torras firma este largometraje coral presentado ayer en la sección oficial con Óscar Jaenada en el reparto juvenil

Hay combinaciones que funcionan en la gran pantalla y, al menos, hacen taquilla. La de sexo, drogas y rock and roll entre jóvenes es una de ellas. La nueva entrega se llama Trash y la firma Carles Torras en catalán y con subtítulos en castellano. Ayer se presentó en la sección oficial de largometrajes a concurso este drama coral con Óscar Jaenada como rockero toxicómano y despechado. El reparto lo completan los jóvenes Judit Uriach, Marta Solaz, David Selvas, Francesc Ferrer, Carla Nieto, Nuria Prims y Assumpta Serna en el papel de madre.

"He intentado transmitir emociones universales, tocar temas que a todos nos afectan y alejarme de los tópicos", comentó su director que debuta con esta cinta en el largometraje.

Los problemas sentimentales, el sexo como catarsis y el afán de destrucción son algunos de los nexos que unen a los distintos personajes. Ingredientes a los que recurre su director para "retratar un estilo de vida y los códigos contemporáneos", explicó el realizador.

Assumpta Serna pronuncia -a juicio de Carles Torras- una de las frases que dan sentido a la trama: "¡Qué felices se les ve cuando son pequeños! Luego cuando se enamoran empiezan los problemas".

El retrato que cada uno de ellos va dibujando a medida que avanzan hacia el abismo devuelve, en opinión de su director y guionista a una generación "predestinada al fracaso sentimental, poco acostumbrada al sacrificio, sin paciencia, individualista y que vive en una cultura del consumo inmediato", enumeró.

El miedo al compromiso, a la soledad, a confundir el amor con el miedo y la utilización de la pareja para alimentar el ego guían el destino de ellas y ellos en una cinta que busca la "emoción" y la empatía con el espectador. Para Torras ingredientes que echa en falta con frecuencia en el cine español, en el que "muchas películas no conectan con el espectador porque hablan de historias con las que no nos identificamos, o beben de una tradición muy literaria o teatral", opinó.

El hecho de estar rodada en versión original en catalán responde a una razón de coherencia. "Sucede en Barcelona y he querido reflejar su idiosincracia. Si no fuera en catalán sería como desnaturalizar la realidad. Quería que fuera muy realista", justificó el director.

En un intento por no repetir la misma fórmula de la comedia y el cine social que responde a los mismos parámetros "que no acaban de funcionar", Torras cree necesario "un esfuerzo por recuperar al público "un propósito para el hace falta "imaginación, creatividad y gente que ame el cine, no acomodarse ni aburguesarse", concluyó.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios