La pareja formada por David y Victoria Beckham no atraviesa su mejor momento. Tras el atraco el pasado viernes a la casa familiar que poseen en la campiña inglesa, en concreto en Oxfordshire, ahora Victoria ha decidido escaparse a un spa en Alemania lejos de su marido y sus hijos.Según la prensa británica, el matrimonio vuelve a estar en crisis y se han disparado los rumores acerca de un posible divorcio. El detonante serían las palabras que el ex futbolista le dedicó a su mujer en una entrevista que concedió al programa de la televisión australiana The Sunday Proyect. David viajó junto a su familia a Sidney para asistir a los juegos Invictus. A la pregunta sobre su relación con su esposa, afirmó lo siguiente: “para que un matrimonio dure tanto como el nuestro siempre es necesario trabajar muy duro. Y cada año que pasa es cada vez más complicado permanecer casado con Victoria”. Una palabras que, al parecer, han sentado como un jarro de agua fría a la ex Spice Girl. “Algunas veces son las pequeñas cosas las que marcan la diferencia, y yo he descubierto que para nosotros lo que mejor nos funciona es proteger a nuestros hijos por encima de todas las cosas”. Según The Sun, esas declaraciones hicieron estallar “una auténtica bomba nuclear” en el hogar de los Beckham y parece que ahora Victoria ha decidido poner tierra de por medio, al menos unos días, para meditar sobre su futuro.David y Victoria celebraron sus 19 años de casados el pasado julio con una romántica cena en París y, hasta ahora, nada hacía presagiar que no llegaran a celebrar los 20 años el próximo verano. Pero una fuente cercana a la diseñadora ha revelado que, tras las manifestaciones de su marido, ella se sintió “avergonzada” y “absolutamente devastada” de que el padre de sus hijos fuera tan “insensible”. De ahí que tan sólo unos días después se haya internado en un spa en Alemania especializado en equilibrio emocional, aunque algunos medios lo llaman ‘centro de desintoxicación’. Victoria pasará unos días en el exclusivo complejo Brenners Park-Hotel & Spa, donde podrá disfrutar de una infinidad de actividades espirituales para relajarse, dejas atrás el estrés y desconectar de sus problemas. En dicho centro el precio de la suite más barata asciende a 17.500 libras (casi 20.000 euros) por día.