Aunque se ha hablado mucho de la cercana relación de Meghan Markle e Isabel II,  esto no implica que toda la familia de la duquesa de Sussex tenga la misma simpatía por la familia real inglesa. Algunos medios señalaron hace unos días que la soberana inglesa había invitado a la madre de Meghan Markle a pasar las navidades junto a ella y los suyos en Sandringham. Pero fuentes del palacio de Kensington han desmentido finalmente que Doria Ragland viaje a Reino Unido con motivo de las fiestas, al menos para Navidad. El hecho de que la suegra del príncipe Enrique haya declinado la invitación de la mismísima Isabel II supone un desaire inédito a la monarca, pues fue ella personalmente la que tuvo este gesto que va en contra del rígido protocolo inglés. El motivo de la instructora de yoga para rechazar compartir mesa y mantel con Isabel II es, no obstante, de peso: quiere pasar estas señaladas fechas con su madre, que ya es mayor, en California.

Los duques de Sussex, con Doria Ragland recientemente.

Este fin de semana People confirmó que la madre de Meghan, quien reside en California cerca de la abuela, había declinado "cortésmente" la invitación de la reina para asistir al palacio de Sandringham y pasar la navidad con el resto de la familia real británica. Incluso trascendió que hasta se le había ofrecido hospedarse en una mansión de Norfolk para que se sintiera más cómoda y cerca de su hija.

Otros cónyuges que se han casado en la familia real inglesa no suelen tener el privilegio de que sus familiares se unan a las celebraciones con sede en Norfolk, ni siquiera la familia de la duquesa de Cambridge ha sido nunca invitada a quedarse en la finca. Los Middleton sí se han reunido otros años a la familia real británica para el tradicional oficio religioso que se celebra en la mañana de Navidad, pero se han alojado en el cercano Anmer Hall en lugar de en Sandringham.

La madre de Meghan Markle, con el príncipe Carlos, el día de la boda de sus hijos.