El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, se comprometió ayer a que, si es elegido presidente del Gobierno, Barcelona sea "uno de los líderes" de la España federal que proyecta y que la capital catalana se convierta en la sede de "instituciones del Estado", que no concretó. En una asamblea abierta en el distrito barcelonés de Nou Barris, en la que arropó al candidato del PSC por Barcelona, Jaume Collboni, Sánchez parafraseó al ex presidente de la Generalitat y ex alcalde de Barcelona Pasqual Maragall y aseguró que "a España le va bien si a Barcelona le va bien".

Sánchez reiteró su promesa de que si el PSOE gana las próximas elecciones generales, impulsará una reforma de la Constitución para "abrir y solucionar el conflicto territorial" de España mediante un Estado federal, aunque ayer dio un paso más y ha garantizado que trasladará a Barcelona las sedes de instituciones del Estado.

"Me comprometo a que uno de los líderes de esta España federal sea la Alcaldía de Barcelona, con instituciones del Estado presentes en Barcelona", indicó Sánchez, que levantó el aplauso de los asistentes a la asamblea abierta, que llenaban el polideportivo de Can Dragó, en Nou Barris.

Sánchez no concretó qué instituciones del Estado planea trasladar a Barcelona, ciudad que ya acoge la sede de la Escuela Judicial y de la Comisión Nacional del Mercado de Telecomunicaciones, aunque ésta última no está operativa.

En su intervención, el líder socialista denunció que el PP ha demostrado que "no tiene un proyecto de país". "Han intentado confrontar a extremeños con andaluces, a andaluces con catalanes, a catalanes con madrileños...estos que van de patriotas y confunden patria con patrimonio y se llevan el patrimonio a paraísos fiscales", sostuvo.

Además, también cargó contra el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de quien aseguró que será recordado como el presidente "de la reforma laboral, los recortes sociales y la amnistía fiscal", puntos a los que los socialistas se han opuesto "en la calle, en el Congreso y en los tribunales". A su juicio, al PP se les está "acabando el tiempo" en los municipios, en las autonomías y en el Gobierno, donde su comportamiento "no ha sido ejemplar".