Ni ramos de flores, ni bombones, ni joyas, ni dibujos, ni felicitaciones de Facebook. Para muchos famosos hoy es un domingo cualquiera. Y es que aunque madre no hay más que una, no son pocas las caras conocidas que no celebrarán este día que, afortunadamente para la mayoría, es muy especial. Como dicen las abuelas en todas las familias se cuecen habas o lo que es lo mismo hay desavenencias, a veces irreconciliables. Los problemas entre padres e hijos, especialmente entre madre e hijas, es el más común. Famoso es el mito de Perséfone y Démeter, que debían de hacer un proceso de separación y vivir el duelo para encontrarse.

Antiguo, aunque no tanto como la mitología griega, es el enfrentamiento de Jennifer Aniston y su madre, Nancy Dow, que no se hablan desde 1996, cuando Dow dio una entrevista revelando intimidades de la ex Friends. Según el Daily Mail, la actriz llamó a su madre y le dijo que jamás la perdonaría, pero aún no había llegado lo peor. La señora escribió en 1999 un libro titulado From Mother And Daughter To Friends: A Memoir sobre su tormentosa relación, lo que evidentemente no ayudó a la reconciliación. La edad, que reblandece, ha conseguido que Jennifer y su progenitora acerquen posturas pero el resquemor entre ellas continúa.

Mucho más cruda es la batalla entre Elton John y su madre, Sheila Farebrother, que llevan años sin dirigirse la palabra. La razón es que Farebrother ha resultado una de esas suegras recelosas y no soporta al marido de su hijo, David Furnish. Y si intentas separar a una pareja, ya se sabe, fácilmente salgas escardado, y en este caso sin un hijo. Por una misma razón tampoco felicitará hoy a su madre Meg Ryan. La actriz no ha hablado con su progenitora, Susan Jordan, desde finales de los 80. Ya no se llevaban bien cuando ella dejó al padre de Meg en 1976, pero luego la señora habló mal del primer marido de Meg, el actor Dennis Quaid, y la actriz la sacó de su vida.

Courtney Love no tiene una buena relación con sus padres, quienes se divorciaron en 1969, pero especialmente tensa es la historia que mantiene con su madre, Linda Carroll. Ésta llevó a su hija a un reformatorio ya que se pasaban el día peleando y esto hizo que, a los 16 años, Courtney se emancipara. Un caso que recuerda al de Drew Barrymore, que también se fue de casa con 17 años por la mala relación que mantenía con su mamá. No ha tenido buena suerte Love y se le acumulan los pleitos familiares; ahora es Frances Bean Cobain, su hija con el rockero fallecido Kurt Cobain, la que no quiere saber nada de ella.

Rumer Willis y Demi Moore siempre han tenido altos y bajos, el más llamativo lo protagonizaron cuando mamá Demi se divorció de Ashton Kutcher y Rumer se puso públicamente de parte del actor. No obstante es ahora cuando la tensión entre ellas está a punto de estallar y sigue siendo por tema de chicos. Parece que tanto se parecen que comparten los mismos gustos y Demi podría haber robado algún 'noviete' a su hija.

No sólo en Hollywood se reproducen estos enfrentamientos madre-hijo como setas. En España, famosas son las desavenencias entre Tita Cervera y Borja Thyssen, Chabelita e Isabel Pantoja o Rocío Carrasco y su hija Rocío Flores.