No perder el tiempo. Abrir caminos que hasta ahora estaban vetados por falta de formación. Mejorar aún más el currículum para poder competir en el mercado laboral. Todas estas razones se han convertido en una máxima para la juventud en tiempos de crisis y ha provocado un alud de solicitudes en la Formación Profesional (FP) sin precedentes.

Los centros de FP de la provincia (88 en total) son estos días un auténtico hervidero porque están recepcionando las inscripciones del alumnado con asignaturas pendientes en septiembre y las matrículas de los que reservaron una plaza en junio. Las colas frente a las secretarías se hacen interminables en horas punta. Y además, en tres de ellos (el Virgen de las Nieves, el Politécnico Hermenegildo Lanz y el Aynadamar), se acaban de celebrar las pruebas de acceso para el alumnado sin requisitos académicos que ha concentrado a casi un millar de personas en cada uno de sus respectivos salones de actos.

"Esto es una locura, en muchos módulos de FP estamos cuadruplicando la tramitación de solicitudes respecto al curso pasado", advierte Rosario de Benito, la secretaria del IES Aynadamar, un centro en el que se forman 1.700 alumnos al año.

Los principales institutos de Granada están desbordados por el aumento de la demanda de los ciclos superiores de FP. A pesar de la ampliación de la oferta que realizó la Delegación Provincial de Educación en abril en previsión de un incremento de alumnado, todo apunta a que un año más se han quedado cortos con la dotación de plazas. La crisis económica y el fácil acceso a la universidad (entran sin tener que hacer la Selectividad) justifican el interés que despiertan estas enseñanzas. Con 6.630 puestos en la provincia para los ciclos medios (unos 854 más que en 2009) y 6.030 para los superiores (623 plazas más), en la mayor parte de los centros consultados por este diario cubrieron toda la oferta antes del verano.

Al igual que ha ocurrido en la Universidad de Granada, los aspirantes de septiembre verán truncados sus sueños de poder estudiar este curso y deberán esperar en casa, sin trabajo ni formación, a la convocatoria de 2011. Ése fue el caso de Fátima Rodríguez, una joven que ha conseguido plaza en el ciclo superior de Estética del IES Aynadamar tras un intento fallido el año anterior. "Quería estudiar la carrera de Fisioterapia, pero acabé el Bachillerato en septiembre de 2009 y no tenía posibilidades de conseguir plaza, así que intenté matricularmente en FP", dice a este diario.

A pesar de las buenas notas de esta joven, le fue imposible encontrar hueco y tuvo que apuntarse a una academia privada de quiromasaje para no pasar el curso de brazos cruzados. En la preinscripción de junio logró entrar en el Aynadamar y ahora se prepara para el inicio de curso, que tendrá lugar el 15 de septiembre. Como le pasó a Fátima, la mayoría de los que formalizan estos días la matriculación (el plazo concluye mañana) no tendrán plaza.

"Septiembre es un engaño", concluye la secretaria del Aynadamar. Los módulos vinculados a la rama sanitaria y al deporte son los más demandados, porque amparan a los aspirantes que no han logrado plaza en la universidad. Incluso los que se preparan las pruebas de acceso sólo tienen reservado un 20% de las plazas. "Yo les recomiendo que opten por la FP semipresencial o a distancia", dice De Benito. Pero son pocos los módulos que pueden hacerse a través de internet.

El director del Hermenegildo Lanz, Raimundo Fornieles, sabe por las colas que tiene en el pasillo que este año se ha vuelto a superar la demanda. "Los chavales se ven en el paro y necesitan emplear su tiempo en algo. Y qué mejor opción que seguir formándose, ¿no?", concluye.