El Ayuntamiento continuará adelante con sus planes de vender tres de sus edificios municipales históricos, pese a las críticas recibidas por la oposición en los últimos meses. Ya prepara la subasta donde se adjudicarán la Casa Agreda, el edificio de Santa Inés y otro inmueble en San Matías.

Según los planes previstos, la junta de gobierno aprobará la semana que viene los pliegos de condiciones de la venta. Es decir, el documento donde se fijará la fecha de la subasta y todos sus detalles: el precio, las características y todos aquellos detalles que condicionen el proceso de adquisición.

El Ayuntamiento ya ha podido detectar en los últimos meses que hay interés externo por estos edificios, pues varias empresas privadas e instituciones públicas se han puesto en contacto con el municipio para conocer los detalles del proceso que al final será una subasta pública.

El concejal de Cultura y Patrimonio, Juan García Montero, explicó que el pliego de condiciones que se someterá a aprobación municipal antes de hacerse público fijará un precio de salida y una serie de elementos a valorar diferentes al factor económico. En concreto, se trata de la finalidad del proyecto a desarrollar en esos edificios. "Vamos a primar que tengan un uso cultural y que generen empleo para la ciudad", declaró el concejal.

En cuanto al precio, García Montero adelantó sólo el caso del edificio de Santa Inés, que saldrá por un millón de euros. El resto se está sometiendo a dos tipos de tasaciones, la de los técnicos de la administración (que es la que exige la ley) y de una empresa privada, porque "se ajusta más a los precios de mercado". Por tanto, será esta última tasación la que sirva más como referencia, dado que el Ayuntamiento trata de sacar el mayor partido a este patrimonio del que se desprende.

García Montero explicó que "no tiene sentido mantener unos edificios que ya no tienen uso municipal y que sólo suponen un importante gasto cada mes para su mantenimiento". La limpieza, la seguridad y otros gastos que se evitarán con la venta van a reportar al Ayuntamiento "un importante ahorro".

Dos de estos tres edificios han sido sedes de áreas municipales hasta hace pocos meses, en que todos los departamentos del Ayuntamiento se han centralizado en el complejo administrativo de Los Mondragones. Es el caso del edificio de Santa Inés, que era sede de la Concejalía de Cultura y allí se ubicaba el propio despacho de García Montero.

El inmueble de San Matías está actualmente cedido a Cruz Roja, mientras esta organización ejecuta las obras de su sede en Cuesta de Escoriaza. En breve estará vacío.

La Casa Agreda, situada en la calle San Juan de los Reyes, es un edificio de propiedad municipal que durante mucho tiempo fue sede de la escuela hogar Divina Infantita. Ahora se encuentra vacío el inmueble porque la escuela se ha trasladado a una nueva sede que el Ayuntamiento ha proporcionado a las religiosas en Casería de la Merced.

Para este edificio, que necesita amplios trabajos de rehabilitación, se ha barajado en algún momento la posibilidad de convertirlo en hotel. Esto implicaría un cambio de uso urbanístico, pero el concejal de Cultura, Juan García Montero, declaró ayer a Granada Hoy que no sería un inconveniente porque es un "trámite administrativo". De hecho, barajan la opción de incluir ese cambio de uso en la eferta que irá a subasta.