El ministro de Fomento, José Blanco, mostró su convicción de que la Comisión Europea aprobará el próximo día 19 de octubre el Corredor Mediterráneo en la Red Transeuropea de Transportes desde Algeciras, recalcó, hasta la frontera francesa porque está "fundamentada" y es "sensata". Aunque reconoció  que conseguirlo hoy "es difícil", el ministro confió en su inclusión. Blanco presentó el estudio técnico del Corredor Mediterráneo en Valencia, acompañado por el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, y la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, del que destacó que ya están en funcionamiento 430 kilómetros de los 1.300 que lo conforman y que el próximo año se añadirán otros 130, con lo que ya estará más de la mitad en servicio y estará "plenamente operativo" en 2020. 

En total, se destinará más de 51.300 millones de euros a todas las actuaciones previstas en el Corredor de los que, concretó, a 31 de agosto ya se han ejecutado inversiones por valor de 9.450 millones y a finales de año se llegarán a los 10.000 millones, mientras que las actuaciones previstas a medio plazo, en 2020, alcanzarán los 24.350 millones, el 47% del total. Al respecto, recalcó que este proyecto será "una realidad en España", ya que cuenta con "un proyecto con plazos y un compromiso inversor para los próximos años". 

Asimismo, el ministro de Fomento explicó que se ha planteado que junto al Corredor Mediterráneo se incorporen a la red básica otros corredores trasversales de gran importancia como es el Corredor Cantábrico-Mediterráneo, que unirá el País Vasco con Valencia pasado por Zaragoza, así como el Corredor Atlántico-Mediterráneo, que el eje Atlántico-Mediterráneo, que irá de Valencia a Siles (Portugal), pasando por Extremadura y Castilla La Mancha. 

 De este modo, resaltó que se está construyendo una nueva España en red mallado que hará que "responda a las necesidades de movilidad de sus ciudadanos respetando el medio ambiente, que reduzca los costes de transportes de nuestras empresas y en la que cada punto del país sea centro y no periferia". Por tanto, José Blanco reiteró que en la apuesta por un sistema de transportes en red el Corredor se erige como una pieza "imprescindible para vertebrar todo el arco mediterráneo y reforzar la capacidad productiva de empresas puertos y aeropuertos para impulsar la competitividad del conjunto de la economía". 

Blanco insistió en que el Corredor Mediterráneo será "la columna vertebral" de este nuevo sistema de transportes. El ministro recalcó que el Corredor Mediterráneo "no es una cuestión de política, sino de números" y en ese sentido aclaró que esta construcción de un sistema de transporte mallado "no es para levantar barreras entre nuestros ciudadanos, ni tampoco para levantar polémicas para nuestros territorios" sino que se diseña para que "todos podamos estar más cerca". 

Blanco aseguró que desde el Gobierno han ejercido "toda la presión" para defender este "ambicioso" corredor desde Algeciras hasta la frontera francesa. Igualmente, el president de la Generalitat, Alberto Fabra, reivindicó que han actuado con lealtad y con exigencia, y sostuvo que en los momentos de dificultad las inversiones deben ser más productivas, mientras que los territorios con buenas infraestructuras salen antes de la crisis.

Pese a la confianza de Blanco en el proyecto de Corredor Mediterráeneo que incluyen Andalucía, la semana pasada todas las apuestas indicaban que la región se quedaría fuera de las prioridades de la red europea de transportes. El eurodiputado de CiU, Ramón Tremosa, apuntó que el Corredor sería aprobado, pero sólo hasta Cartagena, aunque días más tarde, el secretario general de Ferrmed, Joan Amorós, explicó que el mapa no puede quedarse en Cartagena, "ya que nadie aceptaría que el Mediterráneo se quedara a medias", puesto que "media España se echaría encima".

Ayer el titular del Ministerio de Fomento también detalló que en 2012 se pondrá en servicio la Línea de Alta Velocidad Barcelona-Girona-Frontera Francesa con una inversión prevista de más de 4.000 millones de euros, y que en torno a 2013 estarán en servicio las obras de duplicación entre Vandellós y Tarragona con lo que se resolverá el cuello de botella que actualmente supone para el corredor este tramo, el único que queda en vía única entre Barcelona y Valencia. 

Asimismo, en 2012, la Alta Velocidad llegará a Alicante, y en 2014 se extenderá hasta Murcia y recordó que Fomento ha iniciado ya el proceso para licitar el tramo de Alta Velocidad Valencia-Castellón por un importe superior a 1.328 millones de euros, mediante la fórmula de colaboración público-privada. Con esta actuación integral, no sólo se adelantará la ejecución de la nueva línea, sino que se potenciará la conexión, tanto para pasajeros como para mercancías, de la línea de Alta Velocidad Valencia-Barcelona. 

Por su pare, el secretario de Ineco, Ignasi Nieto, explicó el estudio técnico de este proyecto que discurre por cuatro Comunidades autónomas: Cataluña, Comunidad Valenciana, Murcia y Andalucía, y por 11 provincias que suponen el 18% de la superficie de España, y cerca del 40% tanto de la población como del PIB nacional, y genera la mitad (49%) del transporte terrestre de mercancías en toda España.