Francisco Carbonero, secretario general de CCOO en Andalucía, asistió ayer a la reunión del Consejo del sindicato con las direcciones provinciales para discutir las medidas de la huelga y "mantener la tensión de la movilización sostenida en el tiempo para buscar el seguimiento masivo a la huelga general". La medida principal para julio se centra en asambleas informativas en los centros de trabajo y en empresas para conseguir el apoyo de los granadinos, además de en las distintas asociaciones de vecinos de Granada y mercadillos. El secretario añadió a las asambleas distintas manifestaciones en el mes de septiembre, además de "algunas acciones que por razón de estrategia las anunciaremos más adelante", explicó.

La campaña de movilización pretende conseguir que se unan a la huelga general del 29 de septiembre los 2 millones de trabajores andaluces convocados. Además pidió la colaboración de parados y pensionistas, "aunque los que no pueden faltar son los trabajadores activos", afirmó el sindicalista.

El responsable andaluz de CCOO tachó al Gobierno de "cobarde e ineficaz" al adoptar medidas equivocadas ante la crisis. Entre ellas destacó la descausalización del despido objetivo por parte de las empresas, la autorización por parte del Ejecutivo a que las empresas privadas con ánimo de lucro intermedien en el mercado de trabajo, la disponibilidad que el empresario tiene de la jornada laboral y, la ya más que una vez mencionada, jubilación a los 67 años. "La reforma laboral supone la mayor agresión al derecho de los trabajadores", añadió Carbonero, ya que "ningún gobierno se ha atrevido a eso en 30 años de democracia", concluyó.

Respecto a la reestructuración del sector público propuesta por la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas, advirtió que "no queremos que se nos informe en una reunión", sino negociar las condiciones de la reforma para ganar en eficacia y eficencia del sector público en beneficio de los ciudadanos, pero sin que los trabajadores se conviertan en las víctimas de la remodelación tanto en su trabajo como en las condiciones de éste. "Aunque hemos intentado evitar el conflicto, es imposible", aseveró Francisco Carbonero.