Ya es un hecho. CajaGranada, Caja Murcia, Caixa Penedés y Sa Nostra quedaron desde ayer unidos por un lazo económico que todos pretenden que sea muy sólido y les sirva para crecer. Sus respectivas asambleas generales, máximos órganos de gobierno, aprobaron prácticamente sin oposición su fusión fría, la creación del Sistema Institucional de Protección que, todavía de forma oficiosa, se llama Mare Nostrum.

El resultado de esta fusión es un grupo financiero de auténtico peso en el panorama financiero nacional, y especialmente en el arco mediterráneo, que previsiblemente empezará a funcionar en enero de 2011, una vez que emitan sus informes favorables las cuatro comunidades autónomas de las que proceden las cajas -Andalucía, Cataluña, Murcia y Baleares-, el Banco de España y el Ministerio de Economía. Si es viable, trabajará incluso antes de esa fecha.

Por lo que respecta a CajaGranada, su asamblea general duró casi cinco horas y transcurrió sin sorpresas. Además del informe del presidente de la entidad, en el que justificó la necesidad de la fusión fría como algo "ineludible", ya que la caja necesitaba "crecer para ser más fuerte", hubo una intervención, de carácter más técnico, del director general, Ramón Martín, y, tras abordarse otros puntos de menor interés, llegó la hora de la votación.

En concreto, el punto era el siguiente: examen y aprobación, en su caso, de la integración en el Grupo Banco Mare Nostrum a crear por CajaGranada, Caja Murcia, Caixa Penedés y Sa Nostra.

Se produjeron diez intervenciones antes de proceder a la votación. Se pronunciaron 147 consejeros -la asamblea se compone de 155, pero ocho de ellos no acudieron- y todos lo hicieron a favor excepto el representante del sindicato CGT y los seis de Izquierda Unida, que se abstuvieron. En total, 140 votos a favor, lo que supone un porcentaje del 95,2% de los presentes, y siete abstenciones.

En su intervención, IU justificó su postura argumentando, entre otras cosas, que la fusión fría es un primer paso para la progresiva privatización de las cajas españolas. IU no quiso votar en contra porque a la fusión fría, según explicó su coordinador provincial, Manuel Morales, sólo se le podía decir "sí o sí", porque es "la única salida que quedaba" en un panorama en el que el Fondo Monetario Internacional, el Gobierno y la Banca privada empujan hacia un cambio radical en la filosofía de las cajas, que cada vez serán menos públicas, en su opinión.

El resto de los consejeros votó conforme a lo que se había vaticinado, si bien es cierto que el de CGT intervino para anunciar su voto en contra y finalmente cambió de opinión. PSOE y PP ya garantizaban casi en solitario que el punto saliera adelante -para lo cual se necesitaban 103 votos, las dos terceras partes de la asamblea-, pero además recibieron el apoyo de los representantes sindicales, satisfechos con el acuerdo alcanzado con la entidad que fija las condiciones de las prejubilaciones y de los eventuales traslados de empleados.

Al igual que CajaGranada, las otras tres entidades que se integran en el SIP celebraron ayer sus asambleas y todas ratificaron la creación del grupo con el mismo margen de solvencia que la entidad granadina. Mare Nostrum, en consecuencia, nace sin oposición interna -o ésta es prácticamente nula- dentro de sus órganos de gobierno.

En comunicado conjunto, las cuatro cajas incidieron posteriormente en que el grupo nace "con una clara vocación de liderazgo del Arco Mediterráneo y como referente en el sistema financiero español".

Lo acreditaron con datos: más de cuatro millones de clientes, cuarto grupo de cajas por número de oficinas (1.703), quinto por fondos propios (3.855 millones de euros), sexto por volumen de negocio (103.433 millones) y sexto también en volumen de activos (73.055 millones).

El acuerdo permite que cada caja mantenga su margen de autonomía, su identidad, su personalidad jurídica, sus órganos de gobierno y detalles muy significativos como sus obras sociales. Se especifica que cada caja será líder en sus respectivas zonas de influencia. En el caso de CajaGranada, ésta es la comunidad autónoma de Andalucía y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Pero también compartirán cosas.

Se trata, según explicó Antonio Jara, de una integración financiera "de amplio alcance, que incluye un compromiso mutuo de solvencia y liquidez, el establecimiento de un sistema único de tesorería, un compromiso de mutualización de resultados y un programa avanzado de integración funcional, que posibilita la centralización de estrategias y políticas de negocio y el análisis de riesgos, además de la integración operativa y tecnológica".

En la mencionada nota conjunta se hace aún más hincapié en lo que los va a unir a partir de ahora. "Las entidades se integran en un grupo económico consolidable de base contractual con la calificación de Sistema Institucional de Protección, que protege y garantiza la solvencia y liquidez de las entidades que lo integran, sin que existan límites de garantías que se presten los miembros del grupo. De esta forma, las cuatro asumen la garantía recíproca de solvencia y liquidez con una obligación mutua de asistencia financiera del 100% de sus recursos propios".