Una incidencia técnica con el nuevo sistema de venta y reserva de entradas de la Alhambra provocó ayer durante una hora colas de alrededor de un millar de personas que querían acceder al monumento, un colapso temporal agravado por la convivencia con el modelo antiguo, que fuerza a pasar por taquilla.

Según explicó a Efe el director del Patronato de la Alhambra, Reynaldo Fernández, las colas que ha registrado el monumento desde las ocho de la mañana se han debido a un incidencia técnica con el soporte del nuevo sistema de venta de entradas al recinto nazarí. La Alhambra, el monumento más visitado del país, estrenó el pasado 1 de octubre un nuevo modelo ideado para evitar colas que permite la compra de entradas desde una plataforma y que los usuarios impriman los pases en casa para agilizar el acceso.

La incidencia se centró en los pases de última hora de acceso desde la web"

"Se ha producido un error en la web de venta de entradas individuales que ha quedado solucionado a las nueve de la mañana, lo que ha generado una cola en los accesos que se ha sumado a la del tren turístico, ubicada en el mismo espacio", precisó ayer Reynaldo Fernández.

El nuevo modelo de venta y reserva convive con el anterior, que exige a los usuarios pasar por taquilla para recoger el pase, lo que ha incrementado hasta más de mil el número de personas que se acumulaba en los accesos al monumento nazarí.

El director del Patronato de la Alhambra ha aconsejado a los visitantes que accedan a las entradas con el nuevo sistema que llegue con los pases impresos, lo que evita pasar por taquilla. Precisó además que la incidencia se centró en los pases de última hora de acceso desde la web y que se ha solventado en un tiempo aproximado de una hora.

Curiosamente el monumento decidió modernizarse este mes con un nuevo sistema de entradas inteligente que hace más ágil la visita pública, desterrando las 'peregrinaciones' a taquilla y, de paso, minimizando el fenómeno de la reventa al unir cada ticket con el DNI o pasaporte de su titular.

De esta forma después de diez años, la Alhambra ha actualizado el sistema de gestión y venta de billetes, que hasta ahora obligaba a pasar por taquilla.