Técnicos del Ayuntamiento de Armilla y de la empresa promotora del Centro Nevada visitaron ayer la estructura para estudiar qué nuevas medidas, tanto urgentes como a medio plazo, deben adoptarse para evitar desprendimientos, después de que el Juzgado de guardia autorizase el pasado domingo obras de seguridad.

Así lo indicó el alcalde de Armilla, Gerardo Sánchez, que explicó que las fuertes rachas de viento del domingo provocaron la caída de algunas chapas en la estructura -cuyas obras están paralizadas judicialmente-, lo que motivó que se cortara el tráfico en algunas de las calles aledañas al edificio y que se solicitara al Juzgado de Instrucción 8, que estaba de guardia, que autorizase la ejecución de nuevas actuaciones por motivos de seguridad.

Además, un equipo de bomberos se desplazó al edificio y afianzó algunas de las chapas sueltas, informó el regidor, que lamentó que "cada vez que haya viento se tenga que mirar hacia el Nevada y hacia el bienestar de los ciudadanos de Armilla".

"Con independencia de que se resuelvan o no los procesos judiciales en marcha hay que tomar medidas para garantizar la seguridad de los ciudadanos", expresó Sánchez, e indicó que el Ayuntamiento ha comunicado, tanto al juzgado de Instrucción 8 como al 6 -que lleva el caso-, su intención de acometer actuaciones para evitar posibles desprendimientos de la estructura.

A este respecto, precisó que se trasladarán a ambos juzgados las recomendaciones de los técnicos que ayer visitaron el Centro Nevada -que según entiende "están amparadas" por el Juzgado de Instrucción 8- con el fin de que éstos ordenen "lo que estimen conveniente".

"Queremos ser muy prudentes y no buscamos el enfrentamiento con ningún juzgado", manifestó Sánchez, que hace unas semanas ordenó la ejecución de actuaciones en materia de seguridad en la estructura y que fueron comunicadas al titular del Juzgado que investiga las supuestas irregularidades en torno a su construcción, Miguel Ángel del Arco.