La muerte no cesa. Aunque algunos datos permiten vislumbrar una mejoría en la evolución de la pandemia del coronavirus en Granada, la peor consecuencia de la enfermedad, el fallecimiento de personas, sigue siendo una verdadera sangría en esta provincia. Los 9 casos registrados este lunes 20 de abril elevan ya el cómputo de víctimas mortales a 205 y devuelve este dato diario a los peores momentos de la crisis sanitaria. 

De nuevo Granada vuelve a ser el epicentro de las peores noticias en Andalucía, al concentrarse casi la mitad de las muertes (9 de 20) que se han producido en la comunidad en las últimas 24 horas. El dato global es más o menos tranquilizador para la región andaluza, pero en Granada de nuevo es motivo de alarma e inquietud. 

Otros datos contenidos en los registros oficiales diarios son más alentadores. En especial, el de las personas curadas, que en las últimas 24 horas han sido 88 y permiten alcanzar las 704 altas oficiales en la provincia.

Esta cifra de personas curadas, unida a los 9 fallecimientos del día, es superior a la de nuevos casos detectados. Este lunes se han sumado 55 infectados más y ya suman 2.078 desde que comenzó la crisis en marzo pasado. De este modo, el número de casos activos sigue descendiendo día a día, ya que hay menos personas con capacidad de contagiar a la población. 

La Junta advierte de que el número de contagios nuevos no es un indicador de la evolución de la pandemia porque ahora pueden estar aflorando casos de personas incluso asintomáticas a las que se les están haciendo pruebas, sobre todo en sectores como el sanitario, en las residencias o entre las fuerzas de seguridad. Son pruebas cuyos resultados tardar unos dos días en salir, por lo que este lunes registra los casos de los que se sometieron a los test al final de la semana pasada. 

Un indicador más fiable sobre la situación de la pandemia es el de personas hospitalizadas y los ingresos en UCI, que Granada lleva ya una semana con registros muy a la baja. Este 20 de abril hay otros 16 hospitalizados (ya hay 1.057 personas que han requerido una cama de hospital durante la crisis), y 2 pacientes más de UCI. Estas unidades para críticos han sido el caballo de batalla en el momento más crítico de la epidemia, pero los profesionales afirman que ahora la situación a recobrado cierta calma.