El jurado popular que enjuicia al hombre acusado de asesinar a un peluquero en Pinos Puente (Granada) clavándole un destornillador en el cuello lo ha declarado por unanimidad culpable, aunque no de asesinato como calificó la Fiscalía sino de homicidio y con dos atenuantes.

Los miembros del jurado recibieron este jueves el objeto del veredicto para determinar si el acusado Hilario Jesús N.J., sin antecedentes y que en el momento de los hechos tenía 25 años, era responsable de un delito de asesinato por el que la Fiscalía solicitó 21 años de prisión.

Tras la deliberación de más de dos jornadas, el jurado popular lo ha declarado culpable de homicidio, como apuntó al defensa del procesado, y no de asesinato como defendió el Ministerio Público.

Además, han estimado las dos atenuantes aportadas por la defensa, que ha ejercido el letrado Luis Miguel Fernández, por drogadicción y por confesión antes de que se instruyera la causa.

Fernández ha explicado que tras el veredicto confía en que la Audiencia dicte una sentencia que condene a su patrocinado a un máximo de dos años y medio frente a los 21 que solicitó la Fiscalía, que elevó tras el juicio la pena inicial de nueve años de prisión.

Los hechos juzgados desde el lunes se remontan a la tarde del 25 de diciembre de 2016 cuando el acusado estuvo con la víctima, un hombre de 64 años que lo invitó a su casa de Pinos Puente (Granada).

Los dos se conocían con anterioridad, consumían estupefacientes y aprovecharon la vivienda en Pinos Puente del anfitrión para consumir, beber y fumar hasta que, ya de noche, la víctima le propuso al acusado mantener relaciones sexuales como pago de lo consumido, a lo que el joven se negó.

Horas más tarde, el hombre volvió a la vivienda y encontró al joven en el sofá "en estado de sopor", por lo que lo desnudó de cintura para abajo, se quitó también su propia ropa y penetró a su invitado "aprovechando su estado de aturdimiento".

El acusado se despertó dolorido e intentó zafarse de la víctima, para lo que agarró un destornillador con punta de estrella que encontró en la misma sala y lo usó de arma en varias acometidas hasta que en una de ellas la punta se quedó alojada en el cuello.

La víctima fue encontrada el 27 de diciembre semiinconsciente y aunque fue evacuado al hospital, donde ingresó con una lesión traumática, dos heridas incisas y una veintena de lesiones por el destornillador, falleció el 11 de enero de 2017.

Un día después de estos hechos, el acusado se marchó a su país, Ecuador, en un viaje programado con anterioridad y sin conocer esta muerte, de la que se enteró en febrero del año pasado al regresar a España