Un hombre de 23 años ha sido detenido en Motril por la Policía Nacional, como presunto autor de amenazas e intimidación a un grupo de jóvenes a los que pretendía sustraerles sus pertenencias tras hacerse pasar por un agente de la autoridad.

En concreto, dos chicas y un chico relataron a los verdaderos policías cuando se personaron en el lugar de los hechos que el hombre se les acercó y les aseguró que era policía y que estaba investigando la sustracción de unos teléfonos móviles, por lo que les requirió que les mostraran los suyos. Desde el primer momento sospecharon que aquel joven no era policía y que pretendía realmente sustraerles los terminales de telefonía, de modo que le contestaron que no los tenían allí.

Ante esa negativa y ya que portaba bajo el brazo una botella de cristal, concretamente un litro de cerveza parcialmente lleno, tomó una actitud más amenazante haciendo hincapié en que si no les entregaban los teléfonos les propinaría un botellazo y posteriormente agrediría sexualmente a las chicas.

Atemorizadas por sus amenazas, una de las chicas le entregó el monedero de su propiedad que contenía dinero en efectivo. Cuando se encontraba revisando el interior de una de las mochilas de la siguiente víctima aparecieron los agentes, que habían recibido la llamada de un testigo, por lo que ante su presencia arrojó la botella al suelo.

Tras su detención, fue trasladado a las dependencias policiales y puesto posteriormente a disposición de la autoridad judicial.

El detenido cuenta con antecedentes y fue sorprendido 'in fraganti' revisando una de las mochilas de los jóvenes a los que pretendía sustraer los terminales móviles. Gracias a la llamada de un testigo que presenció los hechos y alertó de inmediato a la policía, pudieron detenerlo.