Este fin de semana es el de la transición a la nueva desescalada en Granada tras el fin del estado de alarma este día 9 y las nuevas medidas aprobadas por la Junta para gestionar este camino a la 'normalidad' desde la medianoche del sábado al domingo. 

Por eso en Granada se ha organizado un dispositivo policial adaptado a las nuevas normas de la Junta y a la relajación de medidas con la caída del estado de alarma, que acaba con el toque de queda o el máximo de reuniones. Además, se amplía por orden de la Junta el horario en hostelería y se abrirá el ocio nocturno, por lo que hay que adaptarse a cada fase, determinada por el nivel de alerta de cada zona.

Según ha explicado hoy el concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Granada, César Díaz, "hemos emprendido el camino a la normalidad pero pedimos que se haga con responsabilidad, por lo que hacemos un llamamiento al uso obligatorio de la mascarilla y a mantener las distancias de seguridad. Tenemos que seguir alerta y pendientes de los contagios porque el virus no ha dejado de estar. Los riesgos, con la vacunación, son algo menores pero llamamos a la responsabilidad".

El dispositivo de este fin de semana comienza hoy mismo, viernes. En total habrá estos tres días 206 agentes en tres turnos de mañana, tarde y noche, con un servicio extra de cuatro unidades.

Este viernes en horario de tarde y noche habrá 171 agentes vigilando el cumplimiento de las normas sobre todo en las zonas de mayor afluencia por negocios de hostelería, ocio nocturno o plazas y miradores para evitar botellones y concentraciones.

El sábado serán 106 agentes, de los que 95 estarán en las calles, y el domingo serán 110 agentes, 95 también en vigilancia en las calles.

"El fin de semana habrá los tres días 422 servicios policial y 361 policías en las calles con una media de 40 agentes por turno. Este viernes serán 72 agentes solo por la tarde", ha detallado Díaz.

Según el concejal, se espera que con la fase de transición hay más gente en las calles pero confía también en que se puedan espaciar las salidas al tener mayor horario y se eviten así concentraciones. Aunque sigue insistiendo en que "no podemos tener un policía detrás de cada persona", por lo que solicita responsabilidad individual "para salir de la situación en la que estamos". 

"Queda mucho todavía, no podemos bajar la guardia ante la posibilidad de contagio", ha insistido.

Además, Díaz ha confirmado que la atención a miradores, al Albaicín, el barrio de La Churra, Realejo, Centro, calles Ganivet y Moras, Plaza del Campillo o Pedro Antonio de Alarcón contará con presencia policial permanente, al igual que hasta ahora, y que seguirá siendo fija los fines de semana para garantizar que se cumplen las normas.