Cada día cientos de granadinos soportan incómodos ruidos en sus hogares. El rugido de los motores de los vehículos que circulan por la capital, los grandes grupos de turistas que pasean por las calles del centro o los pitidos de los efectivos locales cuando dirigen el tráfico son solo algunos de los ruidos que se cuelan por las ventanas de las casas a cualquier hora. Sonidos incómodos que los granadinos tienen la oportunidad de valorar en la encuesta sobre ruidos que está llevando a cabo el área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Granada a través de su programa de Agenda Local 21.

Este cuestionario que tiene como título Encuesta de valoración de la respuesta comunitaria frente al ruido ambiental tiene como objetivo conocer aspectos fundamentales de la percepción que tienen los granadinos sobre diversas características ambientales del entorno que rodea su vivienda. Según explica la concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Granada, la participación ciudadana resulta fundamental para poner en marcha actuaciones positivas que mejoren la habitabilidad de cada barrio. Sin embargo, por el momento no se ha llegado al mínimo necesario para que los resultados sean validos: 500 cuestionarios.

Por eso, Ruiz pide a los ciudadanos que participen completando este documento que plantea cuestiones sobre las características de la vivienda, de su entorno, o la valoración del grado de molestia frente a las distintas fuentes de ruido pero también los efectos del ruido ambiental o su actitud frente a este problema. "Deseamos contar con la máxima participación bien a través de la web, en www.granada.org/agenda21 o en los distintos centros cívicos", explica Ruiz que remarca que el tratamiento de los datos suministrados será realizado por el equipo investigador de Agenda Local 21.

De forma paralela el mismo equipo ya ha delimitado las zonas de medición para la actualización del mapa de ruidos de la capital. Según detalla la concejal, está previsto que a finales de octubre esté terminada la evaluación de la zona acústica turística cuyos resultados están previstos para noviembre. En este mes, se llevarán a cabo la evaluación de la zona acústica industrial con datos en diciembre. En el último mes del año será el turno del ruido de la zona acústica docente del Campus con resultados en febrero. En los meses de febrero, marzo y abril se evaluarán las zonas acústicas residenciales. Por último, en mayo se medirán las zonas agrícolas.

Según Ruiz, todos estos trabajos, sumados a la recopilación de la información aportada por los ciudadanos en la encuesta sobre ruidos permitirá que Granada vuelva a disponer de un completo mapa de ruidos en julio de 2015. Será entonces el momento de actuar para hacer de la capital un sitio más amable para vivir.