Cada vez es más común que se lleven a cabo iniciativas municipales relacionadas con el urbanismo con perspectiva de género en la ciudades, a la par que el llamado urbanismo sostenible. A través del primero, se busca crear acciones con las que luchar contra esos puntos negros que generan lo que sería un llamado "Mapa del miedo" de las ciudades, ya sea mediante la mejora de iluminación de las vías, de refuerzos de vigilancia, entre otros, que sirven, no solo para hacer más seguras las calles para la mujer, sino para la sociedad en general. La renovación del alumbrado público es una de las herramientas más fáciles para impulsar estas mejoras urbanas y si, además, a ello se le suma la posibilidad de impulsar un ahorro energético, en aras de cumplir con esa búsqueda de la sostenibilidad, a través de los cambios lumínicos, el resultado es aún más satisfactorio. Esto, precisamente, es lo que ha llevado a cabo el Ayuntamiento de Granada a través de su llamado plan de renovación de las instalaciones de alumbrado público, para lo que se destinará una inversión superior al medio millón de euros.

Desde el Consistorio se ha destinado una partida de 556.920 euros, para "la mejora de la iluminación en todos los distritos de la ciudad, haciendo más seguras nuestras calles y reduciendo el consumo de luz con un importante ahorro energético y económico", tal y como indicó el alcalde de Granada, Francisco Cuenca.

En una visita al barrio de Pajaritos-Doctores acompañado por el concejal de Medio Ambiente y Mantenimiento, Jacobo Calvo, y por la concejala de Derechos Sociales, Nuria Gutiérrez, el alcalde recorrió este miércoles algunos de los espacios donde se va a proceder a renovar las luminarias a través del nuevo plan que da continuidad al que terminó hace unas semanas en la calle Alejandro Otero y que, con un plazo de ejecución de seis meses, permitirá la renovación de un total de 844 luminarias viales y ambientales de alumbrado público por luminarias con tecnología LED.

En total, según ha explicado Cuenca, en la ciudad hay 34.578 luminarias, de las cuales el 20,61% de ellas es LED. “Nuestro objetivo es que en los próximos años lleguemos al 100% de la renovación de la luminaria en esa apuesta por la eficiencia energética a la que aspiramos como ciudad”, indicó el alcalde, quien anunció que desde el Consistorio ya se están desarrollando proyectos para que la capital pueda acogerse a ayudas europeas en esta línea.

“Nuestra meta es hacer de Granada una ciudad más amable, más segura y más sostenible, que reduzca sus niveles de contaminación lumínica y mejore la eficiencia energética, algo que se traducirá en una mayor seguridad para los granadinos, en una mejora de la calidad de vida de los vecinos y en un significativo ahorro económico para las arcas municipales”, apostilló Cuenca.

En concreto, la renovación de estas luminarias, tal y como tiene planteado acometer este equipo de gobierno, permitirá un ahorro energético del 61,2% para el Ayuntamiento; unas cifras que también suponen un ahorro en consumo de energía eléctrica de 162.325 euros anuales frente a los 3 millones de euros en suministro eléctrico para el alumbrado público que actualmente se gasta al año esta ciudad, según ha detallado el alcalde.

La renovación de las luminarias afectará a las calles Emperatriz Eugenia, Camino de Ronda, Méndez Núñez, Fuente Nueva, Severo Ochoa, Cañaveral, Rotonda Aviación, Avenida Juan Pablo II, Francisco Ayala, Plaza de Europa, Gonzalo Jiménez de Quesada, Doctor Azpitarte, Avenida Andalucía, Camino Bajo e Huétor, Rector Marín Ocete, Alcalá de Henares, Carretera de la Sierra, Pedro Machuca y Plaza Guitarrista Manuel Cano. Se trata de vías que afectan a siete de los ochos distritos, quedando exceptuado solo el distrito Albaicín, dado que prácticamente todos los puntos de alumbrado allí ya cuentan con tecnología LED.

Cuenca también se refirió a la “optimización del mantenimiento de las luminarias” que supone esta actuación, “aumentando la vida útil de los equipos y reduciendo con ello los costes de reposición y mantenimiento”. De hecho, las nuevas fuentes luminosas LED presentan una vida de alrededor de 100.000 horas (aproximadamente unos 23 años), frente a las 24.000 horas (aproximadamente cinco años) de las actuales lámparas de vapor de sodio.

“Este plan de renovación de las luminarias cumple, de un lado, con el compromiso de este equipo de gobierno con la sostenibilidad, la eficiencia energética y la reducción de la contaminación lumínica, y de otro, con el compromiso con la mejora de los servicios públicos para todos los granadinos y con la mejora de la vida en nuestros barrios”, concluyó el alcalde.