En el último pleno ordinario algunos efectivos de la Policía Local protagonizaron una protesta silenciosa para reclamar sus derechos. Según indicaron, la histórica merma de las plantillas ha provocado una situación límite en el servicio que también se extiende al cuerpo de Bomberos y que obliga a los efectivos a hacer multitud de horas extra que la capital paga con retraso. La concejal de Protección Ciudadana, Raquel Ruz, recordó ayer las dificultades que tiene el Ayuntamiento tanto para ampliar la plantilla como para asumir el coste del pago de las horas extra dada la precariedad que sufren las arcas municipales. "El problema que tenemos está relacionado con el número de plazas de agentes que se tenían que haber sacado a concurso público hace muchísimos años y no se hizo lo cual ha dado lugar a unas plantillas muy escasas y que envejecidas", destacó Ruz quien recordó que en el último año y medio el equipo de Gobierno está intentando mejorar la situación "como podemos". El problema es que el número de jubilaciones es muy elevado. "Tenemos que ponernos al día, estamos haciendo un esfuerzo importante para mejorar esta situación porque esto da a lugar a problemas de horas extra sobretodo en Bomberos donde siempre tiene que haber 25 en servicio".

La concejal recordó que el Ayuntamiento se ha comprometido a elaborar un plan de pagos para afrontar la deuda. "Esperemos que las circunstancias económicas del Ayuntamiento lo permitan", detalló Ruz quien recordó que en Policía Local sí se han logrado reducir las horas extra.