Después de dos años alejado de la escena pública, el Gobierno andaluz ha recuperado a Alejandro Zubeldia como nuevo delegado de Turismo, Comercio y Deporte, cargo desempeñado durante los seis últimos años por Sandra García. Zubeldia, consciente de la importancia de su puesto y de la buena prensa de su predecesora, afronta esta nueva etapa con la "ilusión" propia de un político que ejerce "de turista, cliente del comercio granadino y deportista convencido".

-¿Cómo le ha sentado la vuelta?

-Muy bien. Evidentemente estoy muy contento de volver a la primera línea política. En este caso, con una responsabilidad bastante bonita en el ámbito del turismo, el comercio y el deporte. Estoy muy ilusionado y muy contento al asumir una responsabilidad tan interesante para la provincia. La Delegación de Turismo es una delegación muy dinámica, porque abarca muchos ámbitos de actuación dinámicos para la provincia.

-Pero se enfrenta a un momento delicado, al menos para el turismo y el comercio...

-El turismo está relativamente bien, en el sentido de que sigue representando un porcentaje muy importante en el PIB andaluz y granadino y se ha convertido en una verdadera industria que genera empleo y riqueza. Granada tiene un potencial magnífico y un futuro bastante importante en tema turístico. Hay mucho en lo que trabajar, pero también contamos con un recorrido bastante amplio. Aquí me gustaría hacer dos reconocimientos. Por un lado, a un magnífico sector empresarial que sabe lo que está haciendo, que es muy profesional, que cuenta con mucha experiencia y que trabaja de la mano de la administración para crear estas condiciones favorables a nivel turístico. Y también, por otra parte, a las distintas administraciones: a todos los ayuntamientos y, sobre todo, a la Diputación de Granada, que está haciendo un trabajo magnífico de colaboración con la Junta y con los municipios.

-Durante la toma de posesión reconoció que se subía a un tren en marcha impulsado por Sandra García...

-La legislatura empezó en mayo de 2008, pero Sandra llevaba ya cuatro años, con lo cual la Delegación tiene ya bastante tramo recorrido en el sentido de que los proyectos ya están en marcha. Yo me tengo que subir a este proyecto, y lo hago con la misma ilusión que tenía Sandra, a la que hay que reconocer el magnífico trabajo desarrollado. Puso el listón muy alto y esperemos, a estas alturas de las circunstancias, por lo menos llegar al mismo listón que Sandra.

-¿Qué objetivos se ha planteados como prioritarios?

-A nivel turístico, finalizar y continuar trabajando con las Iniciativas de Turismo Sostenible (ITS) que existen en la provincia. Está casi toda la provincia cubierta, con lo cual uno de los criterios por los que siempre me he movido en política, que es el equilibrio territorial, se está cumpliendo. Especialmente me he comprometido a trabajar por la Costa Tropical, que tiene unas características y un futuro tan importantes que sería una irresponsabilidad no acometerlos. Y aquí vuelvo a pedir la colaboración y a mostrar mi disposición sobre todo a las administraciones y al sector privado. El empresario tiene que darse cuenta de que tiene que cumplir un papel muy importante, como lo ha hecho hasta ahora, y que debe ser, de manos de la administración, uno de los motores de desarrollo de la Costa. Aparte de la Costa, está Sierra Nevada. Ahora que ha pasado a formar parte del organigrama de la Consejería de Turismo, Comercio y Deporte debe diversificar su futuro en dos sentidos: el turístico y el deportivo, siempre desde el punto de vista medioambiental. Tenemos un triángulo muy importante en la provincia de Granada, formado por la Costa Tropical, el patrimonio cultural, liderado por la Alhambra, y Sierra Nevada. Ese triángulo debe de hacer de efecto tirón a la hora de atraer a visitantes, tanto de fuera como de dentro. Para eso hay que respetarlo, rentabilizarlo y mantenerlo.

-¿Y en los terrenos comercial y deportivo?

-Las aspiraciones son acercarnos al comercio, ser sensibles a sus peticiones, fortalecer el asociacionismo y seguir apostando por los centros comerciales abiertos, por el urbanismo comercial. Otra de las joyas de la provincia de Granada es la artesanía, así que nos comprometemos también a poner en valor sus posibilidades de futuro e intentar que tenga rentabilidad empresarial. Las dos apuestas importantes en el ámbito deportivo son mantener el ritmo del Plan Director de Infraestructuras Deportivas y potenciar y desarrollar el deporte base. El deporte es muy importante, no sólo por la cultura competitiva -aunque también es importante tener campeones y deportistas de elite-, sino también por inculcar a la gente la idea de que la práctica deportiva va en su propio beneficio.

-¿Por dónde pasa el futuro turístico de Granada?

-Por reforzar ese famoso triángulo. La Costa Tropical debe dar el paso definitivo en su desarrollo y me consta que hay iniciativa privada y voluntad política de que así sea. A partir de ahí, una vez que la Costa esté encauzada y lanzada hacia el desarrollo turístico, seguir potenciando Sierra Nevada y su estación de esquí, como otro polo importantísimo del desarrollo turístico. Y aprovechar el magnífico potencial turístico y cultural de la provincia de Granada. A partir de ahí, desarrollar mi política de equilibrio territorial que te decía. No estamos dispuestos a que ningún rincón de la provincia quede desasistido. Granada puede considerarse como un pequeño continente en el que cabe un montón de posibilidades turísticas que hay que saber desarrollar y explotar sosteniblemente. Desde la zona del Altiplano, el Poniente, los Montes Orientales o la Alpujarra. Tenemos una provincia tan variada que todo es susceptible de ser rentabilizado turísticamente.

-¿En qué etapa de la búsqueda de la calidad se encuentra el sector?

-La calidad es un objetivo final y hay que seguir trabajando. Me consta que los empresarios están dando el paso hacia la innovación, la calidad y la excelencia. Saben que al turista hay que tratarlo de la mejor manera posible no sólo para que esté satisfecho, sino para que dé una buena imagen de Granada y nos haga promoción cuando llega a su país de origen. Granada tiene tantas opciones como turistas nos puedan visitar.