El nuevo Hospital del Campus vivió ayer su primer día al completo. Era el primer día laborable tras el traslado de pacientes del fin de semana y por tanto la primera jornada en la que coincidían abiertas la hospitalización, las Urgencias, las pruebas de radiodiagnóstico y las consultas externas. El primer día de rodaje real del edificio y su organización. Y tras el éxito del dispositivo de traslado, en el que se consiguió llevar a todos los pacientes de Traumatología y del Clínico sin problemas e incidencias, llega el momento de analizar ya sobre el terreno los espacios, los circuitos, la señalización, los protocolos... Y, según los profesionales consultados por este periódico, hay cosas que mejorar todavía pero entienden que llevará su tiempo normal de rodaje. No hay problemas graves, pero sí matices para mejorar la forma de trabajar, la asistencia y garantizar una correcta atención a los pacientes. Un extremo que reconoció el domingo tras finalizar el traslado el propio consejero de Salud, Aquilino Alonso, quien aseguró que "habrá que ir adaptándose en un tiempo lógico". Y eso se hace ya sobre el terreno y con el personal probando y rodando las cosas.

De hecho, el hospital sigue abriendo y estrenando zonas y servicios. Hoy es el turno de la actividad quirúrgica programada, que se retoma tras una semana paralizada. El lunes pasado se cerraron los quirófanos que existían en Traumatología y el antiguo Clínico para reducir el número de pacientes ingresados de cara al traslado. Ahora, toda esa actividad programada se hará ya en el nuevo hospital. Las operaciones urgentes se han seguido realizando, la semana pasada aún en los antiguos hospitales y estos días incluso en el nuevo. Marcelo, el primer paciente en llegar al hospital el sábado durante la primera jornada de traslado, y procedente de Traumatología, fue operado esa misma tarde. Hasta el domingo se habían hecho cinco intervenciones urgentes.

Para el estreno de la actividad quirúrgica programada, el hospital realizará 50 operaciones, para lo que usará 17 de los 33 quirófanos con los que cuenta el hospital.

Con la apertura de la cirugía, ya sí está al completo el centro. El sábado se abrieron las Urgencias, que ya están atendiendo con normalidad a los pacientes. La frecuentación está siendo alta y a media mañana de ayer, este periódico pudo comprobar que estaban llenas las salas de espera y que la actividad era incesante. La zona de atención médica está correcta, aunque los pacientes mostraban aún un poco de incertidumbre sobre dónde ir y cómo moverse allí, algo que retrasa también la atención porque el simple hecho de buscar la consulta hace que se pierda tiempo.

En la zona de Radiodiagnóstico y pruebas también la actividad estaba al completo. En la admisión e información principal del hospital, se agolpaban familiares, visitantes y pacientes para informarse sobre dónde ir, cómo llegar a un punto o a qué planta acudir. Una cuestión de adaptación al nuevo edificio que llevará su tiempo y en el que la señalización tendrá que reforzar esa necesidad de información sobre los nuevos servicios.